El expresidente Felipe González ha concedido una entrevista que está siendo comentada por todos los medios. En la misma expone sus planteamientos acerca de la actual situación política. Es partidario de realizar reformas profundas en distintos ámbitos. Y critica la forma de gobernar del PP, por su falta de diálogo, ya que utilizó su mayoría absoluta como un rodillo en la pasada legislatura.

Ciertamente, sus análisis políticos son discutibles, especialmente, al señalar que Podemos “pretende liquidar el marco democrático de convivencia y, de paso, a los socialistas”. Estimo que es una afirmación muy fuerte, y que existen intelectuales de peso que no la comparten. Felipe González no quiere un pacto de investidura y de gobierno de Sánchez con Podemos. Ya que considera que este partido es leninista. Algo que me parece una exageración errónea. Otra cosa es que no le convenzan los procedimientos políticos y democráticos del partido de Pablo Iglesias y Errejón.

En cambio, considero, plenamente acertada, la tremenda crítica de González a la jugada de Rajoy declinando hacerse cargo de la investidura, algo que nunca había sucedido en la democracia española. Que los dirigentes históricos del PSOE se hayan reunido para hablar, y llegar a la conclusión que sería un terrible error pactar con Podemos es, una muestra más, de la efervescencia política que se está viviendo estos días. Además, la reunión del Comité Federal del PSOE del sábado parece que, pondrá de manifiesto, que los barones están poniendo varias condiciones, que harían muy difícil, el pacto de investidura deseado por Pedro Sánchez.

La lucha por el poder entre los partidos más fuertes se está escenificando de un modo rotundo. Y parece que la oportunidad histórica de un gobierno progresista puede que no sea haga realidad. Tal como están las cosas en estos días. La línea roja del referéndum es uno de los escollos a salvar.Los dirigentes de Ciudadanos ya han dicho que no van a pactar con Podemos. Y es uno de los puntos a tener en cuenta en lo relativo a los posibles pactos de investidura.

Las cosas en política son muy complejas. En Baleares, por ejemplo, hay una coalición o acuerdo entre el partido socialista y Podemos, y la gestión política se desarrolla bien.

Por otra parte, parece que Susana Díaz prefiere un gobierno en minoría del PP y un PSOE en la oposición, y su entorno también está de acuerdo con este planteamiento.

Desde Podemos se está ofreciendo un pacto de modo insistente. A Pedro Sánchez le corresponde, en mi opinión, ser valiente e intentar alcanzar un pacto progresista y reformista que está siendo pedido, parece ser, por los diez millones de votantes del PSOE y Podemos.