No corren buenos tiempos ni para el fútbol ni para los futbolistas. Me preocupa que no se hable del deporte en sí. En cambio, las noticias últimamente son sobre supuestas primas de equipos de Primera o Segunda la temporada pasada, clubes en quiebra, ya no sólo modestos, sino de los denominados ‘grandes’, o alarmantes desmayos de jugadores, que siguen añadiéndose a una especie de saco roto. Del Real Madrid, mejor ni hablar.

¡Qué daño hacen al fútbol casos como los de Jesuli y la Real Sociedad o ahora el del Levante! Uno presupone que siempre sale a ganar el partido, incluso está bien visto recibir primas por vencer, pero lo inaceptable es aceptar dinero para perder. Los rumores, los comentarios, las declaraciones deben ser de una vez por todas investigados hasta el final. El claro ejemplo de justicia lo tenemos en Italia con la Juventus o la Fiorentina. ¿O es que piensan que sólo hay amaños en el resto de ligas? Hay que perseguir a los corruptos o los que buscan amañar partido y castigarlos con dureza.

Otro tema serio es los cada día más habituales casos de clubes que viven situaciones muy complicadas de dinero. Algeciras, Levante, Linares, y otros tantos cuyo nombre no me acuerdo, vivieron y viven momentos difíciles económicamente hablando. Pero al fin y al cabo, son equipos modestos. Lo preocupante viene cuando ocurre también a los llamados ‘grandes’. Sería de estudio ver lo que deben los todopoderosos al fisco, pero se saltan con multitudes de pesquisas las leyes. El Valencia, ahora, a lo mejor debe vender a algunos de sus cracks como Villa o Silva para salir de la quiebra.

Pero sin lugar a dudas, lo más alarmante son la cantidad de casos que se están dando de futbolistas que caen desmayados en mitad de un encuentro. Afortunadamente, De la Red o Moreira, lo pueden contar. Pero mejor no quiero acordarme de los otros tantos que desgraciadamente no están ya en este mundo. Urge que se aumente los controles médicos a los deportistas, pero no sólo a los profesionales, sino también a los amateurs. Hay que evitar que ocurran más muertes dentro de un recinto deportivo por patologías cardiacas. Igual que otros deportistas, como los ciclistas, aguantan unos controles exhaustivos, los futbolistas deben ser estudiados y analizados con la misma profundidad. ¿O qué se cree, que sólo se dopan los ciclistas?