Reino Unido cerrará este miércoles su reactor nuclear más antiguo, Wylfa, después
de 44 años de servicio dedicado a la generación de electricidad, como parte de un
programa de desmantelamiento, según ha informado la empresa operadora, Magnox.
Estaba previsto que Wylfa cerrara en 2010 pero "gracias a métodos innovadores ha
continuado generando electricidad otros cinco años". "Ha sido posible trasladando
parte del combustible usado de un reactor a otro", ha detallado Magnox.
Los años extra de funcionamiento de Wylfa "han proporcionado una cantidad
aproximada de 1.000 millones de libras en ganancias a los contribuyentes británicos",
que han sido usados para el plan de desmantelamiento y proyectos de limpieza.
Wylfa, en la localidad de Anglesey, en Gales, "era el último y el mayor de una flota de
11 reactores nucleares construidos a partir del diseño de Magnox, que llevó a cabo al
primer desarrollo nuclear a escala industrial en el mundo".
"Cuando fue construido, Wylfa era el reactor nuclear más avanzado técnicamente en
Reino Unido y el más poderoso del mundo, llegando a alcanzar un pico de 1.000 MW",
desde los 190 MW conseguidos por el primer reactor nuclear de Magnox, el Calder Hall,
en Cumbria.