Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Libros
Etiquetas | Cultura | Poesía
Un poema de Carmen Muñoz

Vivir de nuevo

|

Aprender a vivir es lo que queda,
cuando acaba de repente la alegría
de estar juntos los dos en compañía,
imaginarlo nadie nunca pueda.

Compartimos los sueños día a día,
celaje de amor del que brotaba
mágicos arpegios que volaban
en comunión feliz cual osadía.

Quiero beberme la vida toda entera,
ahogarme si es preciso en la bebida,
desterrar para siempre la nostalgia
y disfrutar sorbo a sorbo, yo quisiera.

Te fuiste sin habérmelo anunciado
quizás antes de tiempo, no lo dudo,
quisiste esperar y no se pudo,
y con profundo penar, me has dejado.

Atrapar quiero el tiempo que me quede,
abrazarlo y curarme las heridas,
renaciendo de todas las cenizas
que del fuego de tu amor me han quedado.

Vivir de nuevo

Un poema de Carmen Muñoz
Carmen Muñoz
miércoles, 4 de noviembre de 2015, 06:09 h (CET)
Aprender a vivir es lo que queda,
cuando acaba de repente la alegría
de estar juntos los dos en compañía,
imaginarlo nadie nunca pueda.

Compartimos los sueños día a día,
celaje de amor del que brotaba
mágicos arpegios que volaban
en comunión feliz cual osadía.

Quiero beberme la vida toda entera,
ahogarme si es preciso en la bebida,
desterrar para siempre la nostalgia
y disfrutar sorbo a sorbo, yo quisiera.

Te fuiste sin habérmelo anunciado
quizás antes de tiempo, no lo dudo,
quisiste esperar y no se pudo,
y con profundo penar, me has dejado.

Atrapar quiero el tiempo que me quede,
abrazarlo y curarme las heridas,
renaciendo de todas las cenizas
que del fuego de tu amor me han quedado.

Noticias relacionadas

Soneto dedicado a la Hermandad del Cristo de los Estudiantes de Córdoba que ha logrado esta imagen, tan cabal como conmovedora, que nos acerca, más aún, al Cristo Vivo del Sagrario.

A pocos días de que comience la Semana Santa, en donde se vive con especial devoción en lugares tan emblemáticos como Sevilla, cae en nuestras manos una característica novela negra del escritor Fran Ortega. Los hijos de justo comienza con el capellán de la Macarena degollado en la Basílica, en donde, además, no hay rastro de la imagen de la virgen. 

Te he mirado Señor, como otras veces, pero hoy tu rostro está más afligido. Sé que ahora te sientes muy herido por agravios que tu no te mereces.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto