Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | A pie de calle
Paco Milla

Vender al mejor... ¿impostor?

|

Hola señor ministro. Le agradezco que me haya recibido. Verá, he insistido tanto, porque estoy convencido que le traigo el mejor regalo. Reconozco, que solo soy un periodista veinteañero, pero he tenido una idea , que creo que es muy buena. Imagínese que pongo en sus manos, por un módico precio, la forma de engañar por siempre a los demás y que estos, lejos de enfadarse, le aclamaran como un genio. Podría inventar lo que le viniera en gana, sin temor alguno a las represalias posteriores. Incluso podría olvidarse para siempre de la disciplina de partido y realmente expresar su sincera opinión... bueno olvídelo, eso no.

Piense en lo que le digo: podría contarles, todo aquello que se le fuera ocurriendo, sin importar que fuera o no creíble, en los escenarios que a usted le pareciera, en el orden que le apeteciera y con la completa seguridad de que cada uno , vería una historia diferente en su cerebro, pero usted siempre estaría en el vértice superior del triangulo. A salvo, en su faro, por muchas olas que azotaran. Le hablo de ser el dios que diseña un presente, un futuro y si me apura... un pasado glorioso.

Jovencito...¡eso a estas alturas , ya es imposible! -dijo el ministro-.
No lo es... -y sacando su mano derecha, oculta tras su espalda, le enseñó... un libro.

Se titulaba: Hágase escritor en quince días. Le enseñamos a mentir de forma profesional. Cómpremelo.

Tú llegarás, chaval, tú llegarás -dijo el ministro-.

¿Estaría mintiendo o habría tenido un desliz? -se preguntaba el recién licenciado-.

Vender al mejor... ¿impostor?

Paco Milla
Paco Milla
lunes, 28 de enero de 2008, 07:36 h (CET)
Hola señor ministro. Le agradezco que me haya recibido. Verá, he insistido tanto, porque estoy convencido que le traigo el mejor regalo. Reconozco, que solo soy un periodista veinteañero, pero he tenido una idea , que creo que es muy buena. Imagínese que pongo en sus manos, por un módico precio, la forma de engañar por siempre a los demás y que estos, lejos de enfadarse, le aclamaran como un genio. Podría inventar lo que le viniera en gana, sin temor alguno a las represalias posteriores. Incluso podría olvidarse para siempre de la disciplina de partido y realmente expresar su sincera opinión... bueno olvídelo, eso no.

Piense en lo que le digo: podría contarles, todo aquello que se le fuera ocurriendo, sin importar que fuera o no creíble, en los escenarios que a usted le pareciera, en el orden que le apeteciera y con la completa seguridad de que cada uno , vería una historia diferente en su cerebro, pero usted siempre estaría en el vértice superior del triangulo. A salvo, en su faro, por muchas olas que azotaran. Le hablo de ser el dios que diseña un presente, un futuro y si me apura... un pasado glorioso.

Jovencito...¡eso a estas alturas , ya es imposible! -dijo el ministro-.
No lo es... -y sacando su mano derecha, oculta tras su espalda, le enseñó... un libro.

Se titulaba: Hágase escritor en quince días. Le enseñamos a mentir de forma profesional. Cómpremelo.

Tú llegarás, chaval, tú llegarás -dijo el ministro-.

¿Estaría mintiendo o habría tenido un desliz? -se preguntaba el recién licenciado-.

Noticias relacionadas

Me he criado en una familia religiosa, sin llegar a ser beata, que ha vivido muy de cerca la festividad del Jueves Santo desde siempre. Mis padres se casaron en Santo Domingo, hemos vivido en el pasillo del mismo nombre, pusimos nuestro matrimonio a los pies de la Virgen de la Esperanza, de la que soy hermano, y he llevado su trono durante 25 años.

Gladio (espada en latín), fue el nombre que se le dio a la "red de agentes durmientes desplegados por la OTAN en Italia y preparados para entrar en acción en caso de que los soviéticos invadieran Europa Occidental", y serían la fuerza aliada que permanecería detrás de las líneas soviéticas para facilitar el contraataque.

El diccionario es permisivo, incluye la rigidez en la delimitación de las entradas y salidas; al tiempo que acoge la pérdida de los formatos cerebrales a la hora de regular las ideas entrantes o las emitidas tras elucubraciones varias. A veces no está tan claro si apreciamos más los desajustes o seguimos fieles a ciertos límites establecidos.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto