Acostumbrado a llenar estadios y a tocar ante grandes audiencias, el artista neoyorquino, uno de los principales músicos de rock de todos los tiempos, ha ofrecido su concierto más íntimo y cercano en el auditorio de Starlite y ha hecho enloquecer al público desde los primeros acordes de su banda.

Acompañado de nueve músicos entre batería, teclados, trompeta, saxofones y guitarras y con tres bailarinas Lenny Kravitz ha ofrecido un espectáculo único en el que ha bailado, saltado e interactuado con el público costantemente, ha salido del escenario para pasearse entre la gente, les ha chocado las manos, se ha arrodillado ante sus fans, les ha ofrecido su micrófono y les ha dedicado palabras como “He venido aquí a amar y a recibir amor. Necesito sentiros, os quiero y os respeto” y en perfecto castellano ha añadido “os doy las gracias a todos; soy yo el que os da las gracias”. El resultado ha sido un concierto entre amigos, lo más parecido a una actuaciónprivada en la que cada espectador se ha sentido único y especial.

Con una energía desbordante, Kravitz ha regalado al auditorio un repertorio en el que se incluían sus temas más conocidos, tanto de su primer disco, Let Love Rules, como de su último ábum, Strut, además de Released y de Areyou gonna go my way.

Entre los asistentes que han acudido a esta cita única se han encontrado Elena Benarroch, Alaska y Mario, El Cordobés y Virginia Troconis, Pablo Carbonell, Javier Banderas, Frank Rijkaard, Fiona Ferrer, Gunilla VonBismarck y Luis Ortiz o Iván Helguera, entre muchos otros El artista ha ofrecido un espectáculo redondo salpicado de mensajes optimistas y energéticos extraídos de algunos de sus temas y ha repetido frases como “Creed en vosotros mismos” o “ dejad que el amor mande” ,,además de “I belong to you, you make my life complete”, dirigiéndose a todo el auditorio.

Kravitz ha desbordado carisma, empatía, un dominio total del escenario y un gran respeto tanto hacia el público, como hacia los miembros de su banda, a los que ha cedido el escenario para que realizaran solos de sus instrumentos y les ha presentado ante el público nombrándoles uno a uno por sus nombres y brindándoles una sonora ovación.

El público no ha dejado de bailar, saltar y corear a pleno pulmón los temas de uno de los rockeros más importantes y premiados en la que ya es una noche para el recuerdo. Un show completo que ha dejado a lo asistentes boquiabiertos “ Esto sólo pasa aquí”, ha declarado un espectador. “Esto hay que contarlo”, ha declarado otro que estaba a su lado.