El grupo terrorista Estado Islámico ha ejecutado a más de 2.600
personas, incluidos más de 1.500 civiles, solo en Siria desde que a finales
de junio de 2014 autoproclamó su 'califato' en los territorios bajo su
control en este país y en el vecino Irak, según el recuento realizado por el
Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
Los cargos por los que se ha ejecutado a todas estas personas van
desde la blasfemia, espiar para el régimen de Bashar al Assad, sodomía,
luchar, protestas o espiar contra Estado Islámico, traición, pertenecer a
las fuerzas de seguridad sirias, tráfico de drogas, recibir entrenamiento
de la coalición internacional en Turquía o apoyar a las Unidades de
Protección Popular (YPG), las milicias kurdas sirias.
De acuerdo con el Observatorio, con sede en Londres y una amplia red de informadores
en Siria, entre los ejecutados hay 1.511 civiles, incluidos 23 niños y 32 mujeres. Entre los
métodos de ejecución empleados figuran la decapitación, el fusilamiento o la lapidación y
las ejecuciones han tenido lugar en las provincias de Deir Ezzor, Raqqa, Al Hasaka, Alepo
Damasco Rural, Homs y Hama.
Asimismo, figuran 825 oficiales y soldados de las fuerzas gubernamentales que fueron
detenidos durante los enfrentamientos y posteriormente ajusticiados, así como 143
combatientes del Frente al Nusra, filial de Al Qaeda en Siria, y de otros grupos islamistas
rivales, a los que igualmente se ejecutó tras detenerlos durante choques o en puestos de
control.
La organización que lidera Abu Bakr al Baghdadi también ha ejecutado en este último
año a 139 de sus propios miembros por "exceder los límites de la religión y espiar para
otros países". En la mayoría de los casos, según el Observatorio, fueron ejecutados tras
ser detenidos cuando intentabar regresar a sus casas.
Sin embargo, el Observatorio considera que "el número real de personas que han sido
ejecutadas es superior al documentado porque hay cientos de desaparecidos y de
detenidos dentro de las cárceles de Estado Islámico".
Así las cosas, ha recordado al Consejo de Seguridad de la ONU "su misión de mantener
la paz y la seguridad internacional" y le ha pedido que actúe urgentemente para "ayudar a
los sirios que han sufrido y siguen sufriendo masacres a diario ante los ojos de los
miembros del Consejo", remitiendo estos abusos y "crímenes de guerra a los tribunales
internacionales especializados".