El PP de Valladolid se desploma al obtener solo 12 concejales y no alcanzar la mayoría absoluta. Todas las encuestas se han equivocado. Tras veinte años de gobierno del PP, Javier León de la Riva dejará de ser alcalde de Valladolid tan pronto como se reúnan los perdedores para repartirse el pastel. Llegan a un Ayuntamiento saneado, sin déficit, por lo que es de desear que lo dejen saneado el día que lo abandonen. Ya se sabe que el socialismo se acaba cuando se acaba el dinero público. A partir de ahí…

Ciudadanos obtiene 2 concejales; es decir, muy por debajo de las expectativas de las encuestas y el PSOE pierde un concejal y se queda en 8. El comunismo de Valladolid, teñido con la expresión “IU”, suma uno (obtiene cuatro), pero lo hace con el disimulo-tapadera de “Valladolid Toma la Palabra” y “Sí se Puede”, marca blanca de la formación de Pablo iglesias, entra en el Consistorio con 3 ediles.

No hay duda de que es un resultado histórico el que se ha producido en el Ayuntamiento de Valladolid. Se abre un portillo para un posible pacto y así arrebatar la alcaldía a Javier León. El PP se ha desplomado por incumplimiento de programas, desprecio a la ciudadanía e invasión de competencias inusuales: de 17 concejales se han quedado en tan sólo 12. Ni siquiera sumando los dos concejales obtenidos por Ciudadanos alcanza mayoría. No es de extrañar que León de la Riva esté destrozado moralmente. Ahora, el PSOE promete levantar alfombras y abrir todos los expedientes. El rencor y el colmillo retorcido no son buenos compañeros de viaje.

La izquierda no va a consentir que gobierne la lista más votada. Y si Oscar Puente obtiene la alcaldía, lo primero que prometió fue devolver a los vallisoletanos la tasa de basuras, abusivamente cobrada en 2015, así como no poner en circulación la de 2016: vamos a ver si es capaz de cumplir o copia el incumplimiento del PP que tan caro le ha costado en estas elecciones. Si empieza a mentir como ha hecho Mariano Rajoy, acabará pagándolo porque la ciudadanía no es tonta y menos ahora por aquello de que ya está escarmentada.

Para cualquiera, la debacle del PP no ofrece dudas, aunque sea el partido más votado en Valladolid y en todo el Estado. El PP se ha dejado por el camino muchos miles de votos que serán difíciles de recuperar de aquí a las elecciones generales de diciembre. Ciudadanos se ha desinflado y ha dejado al PP con las posaderas al aire en muchos sitios.

“La izquierda tiene la responsabilidad y la oportunidad de cambiar esta ciudad. Y no la va a desaprovechar. En Valladolid habrá un acuerdo para la esperanza y para el futuro. Que nadie lo dude”, según plasma en Twitter el candidato del PSOE, Oscar Puente. El candidato del PSOE ‘babea’ por ser alcalde, de ahí que muchos vallisoletanos se lleven las manos a la cabeza; no obstante, está en pleno cuento de la lechera. Al tiempo.