Ayer, escuchando un debate entre los candidatos a la alcaldía de la ciudad de Barcelona, una cosa me quedo absolutamente clara, si hay alguien a quien temen todos los candidatos, sin excepción, es al candidato Socialista Jaume Collboni. Cuando constantemente te interrumpen, te atacan sin argumentos firmes ni coherentes, cuando tratan por todos los medios que tus propuestas no sean expuestas es únicamente porque te TEMEN.

Los que conocemos de cerca la ciudad condal y hemos escuchado uno que otro debate sabemos que solo hay una persona con ideas claras y propuestas concretas para hacer de Barcelona, nuevamente, una ciudad de progresista y de vanguardia.

Collboni habla con la seguridad y la concreción que le da su experiencia y el convencimiento de poder hacer las cosas bien. Su prioridad es la ciudad de Barcelona y sus ciudadanos y por sobre el bienestar de ellos y el avance y crecimiento de la ciudad no existe nada.

La gente de la ciudad sabe y tiene claro que el actual alcalde Trías ha hecho muy poco o nada por el bienestar común y el desarrollo de Barcelona, y lo casi nada que ha realizado sólo ha favorecido a una parte muy concreta de los habitantes de ella, a los que viven de la Diagonal hacia arriba como se escucha cada vez más claro en la calle. Los barrios tradicionales, que son muchos, en Barcelona están sufriendo hace cuatro años un completo abandono por parte del consistorio.

Jaume Collboni tiene una visión moderna y aglutinadora de la ciudad, él quiere una Barcelona que esté acorde a los tiempos que vivimos y donde lo social sea el eje principal de su gobierno. Ejemplo de su constante preocupación por los ciudadanos y su día a día es la rebaja de la T10 que se hizo realidad a comienzos de este año exclusivamente gracias a su gestión que obligó a CIU a ceder ante algo tan básico como ayudar a los usuarios del transporte público, no solo rebajo el precio del tiquet más usado por todos, sino que amplió de manera considerable el arco de personas que tenían derecho a acceder a la llamada Tarjeta Rosa que no es otra que aquella que favorece a los pensionistas de la ciudad.

Collboni tiene un discurso sencillo y concreto que se preocupa por los problemas reales de la gente y eso lo convierte en el único candidato creíble y sostenible, habla de cosas reales y soluciones completamente viables, solo basta mirar su programa electoral, en él se prioriza el desarrollo económico de la ciudad creando 30.000 puestos de trabajo de los cuales 10.000 derivarían de la mejora que se propone realizar en los barrios hasta ahora olvidados por Trías, otros 10000 incentivando a los Autónomos y otros 10000 invirtiendo en infraestructuras. En él se habla de rehabilitar 80.000 viviendas para hacerlas accesibles y sostenibles.

Jaume Collboni nos habla de crear un nuevo modelo de ciudad y para eso es indispensable crear un nuevo modelo económico, crear trabajo garantiza la igualdad y devuelve la dignidad a miles de Barceloneses que hoy se sienten menos persona y se encuentran en riesgo de pobreza y marginalidad.

El candidato Socialista promete trabajar para crear un plan financiero que garantice las infraestructuras de transportes que son fundamentales para la ciudad con dinero del fondo europeo del plan Junker.

Si analizamos todo el programa electoral, que lo encontraras en este link http://www.collboni.cat/wp-content/uploads/2015/04/psc-programa-electoral-3.pdf , nadie puede negar que la gente y la ciudad son y serán el eje de su gobierno, y esto no es de extrañar, por más que algunos pretendan negarlo u ocultarlo, siempre han sido los gobiernos Socialistas los que han traído el progreso y el avance en todo índole de cosas a la ciudad.

Sería insensato negar la gran transformación que sufrió Barcelona en el año 1992 y que vino de la mano de un gobierno Socialista. Justamente es este espíritu de creación, desarrollo, avance, igualdad y solidaridad que corre por el ADN Socialista el que pretende devolver Jaume Collboni con un programa serio, viable y respetuoso con la ciudad y la ciudadanía.

Este 24M Barcelona tiene una gran oportunidad y no es otra que la de recuperar el sitial vanguardista que le corresponde y la única manera, el único camino para hacerlo de forma seria es votar Jaume Collboni.