Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Etiquetas | El ojo crítico
Juan María Leiva

Decisiones comprometidas

|

Hace ya unos meses, expuse en estas mismas líneas una teoría que por aquel entonces parecía una majadería. En un momento en el parecía claro que el presidente del Real Madrid, Ramón Calderón, estaba decidido a no prolongar la estancia de Fabio Capello en el club, aposté a que al final de campaña las ‘voces del madridismo’ no estarían de acuerdo con semejante decisión.

Sí, ya sé. El que no leyese en su momento el escrito, me tachará de ir a favor de corriente. Pero creo conveniente volver a hablar de ello hoy. Y es que los rumores dicen que lo de Schuster en el banquillo blanco es una realidad. ¿Se dará otra vez el mismo caso que con Del Bosque? ¿Despedido tras conseguir la Liga?

Pues el caso es que la situación actual tiene sus semejanzas. Del Bosque consiguió coger las riendas de un vestuario tan repleto de calidad como de problemas y guiarlo hacia el triunfo. Pero Florentino Pérez vio conveniente un cambio de rumbo. La decisión dio inicio a un largo periodo de sequía de títulos, que acabó con el final del mismísimo Florentino y su imperio galáctico.

Hoy Calderón se encuentra en la misma postura que Florentino en su momento. A Capello se le firmó para ganar títulos y el italiano lo ha cumplido. Se le trajo para poner orden en el vestuario, y el conjunto es una piña. Se pedían resultados y no fútbol, los resultados están ahí y el espectáculo ha brillado por su ausencia.

Por lo tanto lo ético sería que continuara. Pero Calderón sabe lo que es el Madrid y lo que significa jugar en el Bernabeu. Una vez que la hinchada ha probado la miel del éxito, querrá más. Jactada su hambre de títulos, esperarán espectáculo. Y el presidente es consciente de que el italiano no podrá cumplir tales exigencias.

¿Qué hará entonces con el señor Capello? La decisión es sólo suya. Y por más que diga que se ha apoyado en su director deportivo, todos le miraremos a él como al mayor culpable, tanto para lo bueno como para lo malo. Florentino estuvo en su misma situación. Tuvo que decidir… y se equivocó.

Decisiones comprometidas

Juan María Leiva
Juan María Leiva
jueves, 21 de junio de 2007, 07:28 h (CET)
Hace ya unos meses, expuse en estas mismas líneas una teoría que por aquel entonces parecía una majadería. En un momento en el parecía claro que el presidente del Real Madrid, Ramón Calderón, estaba decidido a no prolongar la estancia de Fabio Capello en el club, aposté a que al final de campaña las ‘voces del madridismo’ no estarían de acuerdo con semejante decisión.

Sí, ya sé. El que no leyese en su momento el escrito, me tachará de ir a favor de corriente. Pero creo conveniente volver a hablar de ello hoy. Y es que los rumores dicen que lo de Schuster en el banquillo blanco es una realidad. ¿Se dará otra vez el mismo caso que con Del Bosque? ¿Despedido tras conseguir la Liga?

Pues el caso es que la situación actual tiene sus semejanzas. Del Bosque consiguió coger las riendas de un vestuario tan repleto de calidad como de problemas y guiarlo hacia el triunfo. Pero Florentino Pérez vio conveniente un cambio de rumbo. La decisión dio inicio a un largo periodo de sequía de títulos, que acabó con el final del mismísimo Florentino y su imperio galáctico.

Hoy Calderón se encuentra en la misma postura que Florentino en su momento. A Capello se le firmó para ganar títulos y el italiano lo ha cumplido. Se le trajo para poner orden en el vestuario, y el conjunto es una piña. Se pedían resultados y no fútbol, los resultados están ahí y el espectáculo ha brillado por su ausencia.

Por lo tanto lo ético sería que continuara. Pero Calderón sabe lo que es el Madrid y lo que significa jugar en el Bernabeu. Una vez que la hinchada ha probado la miel del éxito, querrá más. Jactada su hambre de títulos, esperarán espectáculo. Y el presidente es consciente de que el italiano no podrá cumplir tales exigencias.

¿Qué hará entonces con el señor Capello? La decisión es sólo suya. Y por más que diga que se ha apoyado en su director deportivo, todos le miraremos a él como al mayor culpable, tanto para lo bueno como para lo malo. Florentino estuvo en su misma situación. Tuvo que decidir… y se equivocó.

Noticias relacionadas

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto