Lejos, muy lejos, de mi intención salir en defensa de nadie, en este caso de Juan Carlos Monedero, yo siempre tengo muy presente aquello de que “a quien Dios se la de san Pedro se la bendiga”, pero sí debo decir que en mi opinión Monedero ha ido mucho más lejos de lo que se le exigía a la mujer del César.

Tengo muy claro y se distinguir perfectamente todo lo relacionado con aquello que se concreta a la hora de rendir cuentas y contribuir al “engorde” de la Hacienda Pública bien a través de declarar beneficios como persona jurídica o como persona física. Es por ello por lo que pienso que Monedero no ha defraudado en ningún momento a Hacienda ya que la ley tributaria le faculta, a él y a todos, a contribuir en la forma que considera más beneficiosa para sus intereses. Está claro que Monedero decidió hacerlo a través de la figura de la persona jurídica pero la presión de algunos medios y sobre todo por parte de algún partido político que tiene mucho por qué callar ha provocado el que se decida a presentar una declaración complementaria como persona física que en mi opinión no era necesaria y que solo ha contribuido a que todos esos que calladitos estarían más guapos sigan metiéndole el dedo en el ojo. Monedero se ha equivocado, no es un defraudador pero sí ha demostrado ser un ingenuo.

Hay antecedentes de políticos que han utilizado y siguen utilizando para su contribución a Hacienda a la persona jurídica, es decir a dar cuenta de su actividad profesional y privada a través de esta figura legal y para ello pongo un solo ejemplo. El 10 de mayo de 2004, pocos días después de dejar la presidencia del Gobierno, José María Aznar fundó la empresa Famaztella, S.L. (acrónimo de familia Aznar Botella) con un capital social de 3.000 euros la cual, según contaba el 9-11-2010 un periódico nacional, cerró el ejercicio de 2009 con unos ingresos de 620.732 euros y que después de impuestos quedó un beneficio neto de 445.417 euros. Los fines sociales de esta empresa son “la explotación de los derechos de propiedad intelectual en todas sus manifestaciones” tales como los derechos de autor de sus libros o las conferencias. Es decir que en el caso de Monedero se trata de obtener unos ingresos por asesoramiento relacionado con su actividad profesional y en el caso de Aznar por escribir libros y dar conferencias. Quiero llamar la atención sobre el hecho de que según algunos medios de comunicación la empresa de Monedero no cuenta con personal adscrito a su plantilla laboral de ahí que le acusen de que la empresa es una tapadera para pagar menos a Hacienda, pero el caso de Aznar también es muy curioso, en 2009 los gastos de personal de Famaztella ascendieron a 10.537 euros, 878 euros al mes, por esta cantidad se puede pensar que se trataba de algún o algunos becarios a los cuales les daba una “propina” para que fueran al cine o para comprarse algún helado. Por el concepto de servicios exteriores Famaztella solo efectuó pagos por valor de 2.959 o sea que se puede pensar que todo se hacía en plan familiar. Desde su fundación y según relata la información de prensa ´”la facturación ha ido aumentado y por ello los beneficios año tras año, de modo que la sociedad acumula cinco años y medio después, de mayo de 2004 a diciembre de 2009, un patrimonio de 1,6 millones de euros. La mayor parte de esos activos financieros están en dólares”. A todo esto hay que añadirle los 210.000 euros anuales de sus respectivos sueldos, porque Aznar cobra más de un sueldo.

Imagino que todo esto habrá ido a más ya que estos datos corresponden a 2009, el peor año de la crisis, y que yo sepa Aznar no ha hecho ningún tipo de declaración complementaria a la Agencia Tributaria en calidad de persona física como ha hecho Monedero, menos motivo para hacerlo en tanto en cuanto no hay movimiento alguno de presión por parte de la Agencia Tributaria para que sea objeto de una inspección tal como se está barajando en el caso de Monedero y que tampoco vaya a intervenir el propio Montoro de forma descarada como lo está haciendo en el caso del dirigente de Podemos.

No quiero cansar más a lector pero también se podría hablar de Loreto Consulting la empresa de la esposa del exministro de Aznar, Josep Piqué. Pero como antes he dicho como muestra basta con un solo botón. A todo esto le llaman igualdad de trato. Insisto, no defiendo a nadie, solo comparo.