El ministro de Exteriores de Jordania, Naser Judeh, ha asegurado este jueves que los bombardeos ejecutados durante la jornada por Amán contra las posiciones del grupo extremista Estado Islámico son "el inicio de sus represalias" por el asesinato de su piloto Muaz al Kasaesbeh.
"Estamos subiendo la apuesta. Vamos a ir a por ellos allá donde estén, con todo lo que tenemos. Pero eso no es el principio, y claramente no es el final", ha dicho, en unas declaraciones concedidas a la cadena de televisión estadounidense CNN.
Por su parte, el ministro de Comunicaciones y portavoz del Gobierno, Mohamed al Momani, ha recalcado que la respuesta de Amán "será firme y será decisiva". "No dejaremos que el crimen del asesinato de uno de nuestros pilotos de esta forma tan horrible quede sin castigo", ha remachado.
El Ejército jordano ha informado en un comunicado de estos ataques, que han sido "sólo el principio" y han estado dedicados a la memoria del "mártir" Al Kasaesbeh, secuestrado en diciembre después de que su avión cayese en el este de Siria. Los ataques han permitido la destrucción de centros de entrenamiento y depósitos de munición.
En su nota, recogida por la agencia oficial, Petra, las Fuerzas Armadas han insistido en que el Estado Islámico "pagará el precio" de su acción y han advertido de que harán "todo lo que puedan" para defender los "verdaderos valores del Islam" y "eliminar" a la milicia suní.
Jordania es uno de los países implicados en la coalición internacional que lidera Estados Unidos y, tras el asesinato del piloto, ya había advertido de que intensificaría su participación en esta alianza. El rey Abdalá II prometió una "respuesta estremecedora".