Y, efectivamente, Chicago ha confirmado que es un serio candidato al título de la NBA. Como ya comenté en el último artículo, los Bulls este año van en serio, y eso que en la última jornada de la Liga Regular cayeron hasta el quinto lugar de la clasificación, lo que les ha obligado a enfrentarse a los Miami Heat, el actual campeón, en la primera eliminatoria por el título.
El conjunto de Scott Skiles ha desplegado un juego espectacular y ha conseguido 'barrer' a la escuadra de Pat Riley, quien ya avisó minutos antes del último encuentro de la serie de que "estar perdiendo 3-0 frente a los Bulls no es ninguna sorpresa". En Miami, Shaquille O'Neal y Dwayne Wade no han estado a la altura, en parte porque el bloque de Chicago ha sabido anular su juego gracias a la portentosa defensa de Ben Wallace y Luol Deng.
Wallace, que firmó 13 puntos y 11 rebotes en el cuarto partido y clavó los tiros libres en los últimos segundos -algo sorprendente-, afirmó al término del encuentro que su equipo "ha madurado" y que eliminar a Miami les supone una gran dosis de "confianza".
Wallace, ex de los Pistons, volverá a Auburn Hills, donde será el gran protagonista de una de las semifinales del Este que enfrentará a Chicago contra Detroit, el enfrentamiento soñado por cualquier nostálgico del baloncesto estadounidense de la década de los 90.
Los Pistons vienen de solventar por la vía rápida su duelo frente a los Orlando Magic y qué duda cabe que todos los aficionados hubiéramos deseado ver este envite frente a Chicago en la Final del Este. El destino no lo ha querido así pero, en cualquier caso, será un deleite para todos los sentidos.
Hinrich contra Billups; Gordon contra Hamilton; Deng contra Prince; Brown contra Rasheed Wallace y Ben Wallace contra Chris Webber. Y eso que sólo es el cinco inicial. En el banquillo aguardan los Antonio McDyess, Andrés Nocioni, Carlos Delfino, Tyrus Thomas...