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Patxo Palacios

La hora de la verdad

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Llegamos a la fase decisiva del campeonato y con poco decidido aún: por arriba, por abajo y ni qué decir tiene… por la selección. El combinado nacional disputa mañana un trascendental encuentro ante Dinamarca, que puede marcar una reacción que nos acerque al Europeo - eso y no más supondría la victoria – o el batacazo definitivo, que supondría el adiós a la clasificación y, con seguridad, el del propio Luis Aragonés.

Uno tiene la sensación de que el potencial colectivo, no el individual, de la selección española ha estado casi siempre sobrevalorado. Y su propia trayectoria en las fases finales de Mundiales y Eurocopas así lo ha venido demostrando década sí, década también.

Dicho lo cual, habrá que convenir que el nivel de España debería al menos haber supuesto tener media clasificación a estas alturas en el bolsillo. Sea como fuere, esperemos que la remozada (e inédita) defensa con Angel, J.Navarro, Marchena y Capdevila de sus frutos; al que suscribe no le ofrece una seguridad aplastante, que digamos; espero equivocarme. A ver si Morientes y/o Villa, por su parte, tienen una buena noche en el Bernabeu, para contrarrestar.

Enfrente, un buen equipo, con el sevillista Poulsen tirando del carro. No duden de que va a ser un partido complicado. Las bandas con los rápidos Jorgensen, Rommedhal y Kahlenberg pueden hacer daño a los laterales hispanos si no se aplican bien en el marcaje. En la punta, ojo a Tomasson, aunque parece que pasaron ya sus mejores años.

En el frente nacional, tanto en Liga, como en Copa, parece que el título es cosa de dos: Sevilla y Barça. Cierto es que Valencia y Madrid aún están vivitos y coleando en la Liga. El Madrid, en todo caso, salvo sorpresa mayúscula, no debería pelear por el título hoy por hoy…no da el nivel. Los chés, sin duda, lanzarán su artillería más pesada contra la pérfida Albion londinense de Mourinho y ello les podría mermar en Liga.

Que nadie dude del potencial de los pupilos de Quique, que pueden llevarse tranquilamente la Champions, al tiempo.

Por debajo tortas, con un Athletic en grave crisis y una Liga de torpes por el tercer puesto del descenso entre los bilbaínos, Celta, Levante, Mallorca y Betis.

Solo caerá uno, porque a la Real y al Nastic no los libera Simón Bolívar... ni su patético discípulo Chávez.

La hora de la verdad

Patxo Palacios
Patxo Palacios
domingo, 25 de marzo de 2007, 12:30 h (CET)
Llegamos a la fase decisiva del campeonato y con poco decidido aún: por arriba, por abajo y ni qué decir tiene… por la selección. El combinado nacional disputa mañana un trascendental encuentro ante Dinamarca, que puede marcar una reacción que nos acerque al Europeo - eso y no más supondría la victoria – o el batacazo definitivo, que supondría el adiós a la clasificación y, con seguridad, el del propio Luis Aragonés.

Uno tiene la sensación de que el potencial colectivo, no el individual, de la selección española ha estado casi siempre sobrevalorado. Y su propia trayectoria en las fases finales de Mundiales y Eurocopas así lo ha venido demostrando década sí, década también.

Dicho lo cual, habrá que convenir que el nivel de España debería al menos haber supuesto tener media clasificación a estas alturas en el bolsillo. Sea como fuere, esperemos que la remozada (e inédita) defensa con Angel, J.Navarro, Marchena y Capdevila de sus frutos; al que suscribe no le ofrece una seguridad aplastante, que digamos; espero equivocarme. A ver si Morientes y/o Villa, por su parte, tienen una buena noche en el Bernabeu, para contrarrestar.

Enfrente, un buen equipo, con el sevillista Poulsen tirando del carro. No duden de que va a ser un partido complicado. Las bandas con los rápidos Jorgensen, Rommedhal y Kahlenberg pueden hacer daño a los laterales hispanos si no se aplican bien en el marcaje. En la punta, ojo a Tomasson, aunque parece que pasaron ya sus mejores años.

En el frente nacional, tanto en Liga, como en Copa, parece que el título es cosa de dos: Sevilla y Barça. Cierto es que Valencia y Madrid aún están vivitos y coleando en la Liga. El Madrid, en todo caso, salvo sorpresa mayúscula, no debería pelear por el título hoy por hoy…no da el nivel. Los chés, sin duda, lanzarán su artillería más pesada contra la pérfida Albion londinense de Mourinho y ello les podría mermar en Liga.

Que nadie dude del potencial de los pupilos de Quique, que pueden llevarse tranquilamente la Champions, al tiempo.

Por debajo tortas, con un Athletic en grave crisis y una Liga de torpes por el tercer puesto del descenso entre los bilbaínos, Celta, Levante, Mallorca y Betis.

Solo caerá uno, porque a la Real y al Nastic no los libera Simón Bolívar... ni su patético discípulo Chávez.

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