Hace muy poco me sorprendí defendiendo la libertad de expresión, coincidiendo en ello con destacados matarifes de la derecha digital, en un artículo sobre las famosas caricaturas de Mahoma. Sigo manteniendo lo dicho. La religión no está por encima del derecho a la libertad de expresión, ni puede ni debe matizarlo o limitarlo. Claro que yo me refería a TODAS las religiones, incluyendo a la cristiana. Ahora se ha venido a demostrar que ese no era el caso de los matarifes de la derechona digital que, es evidente, escribieron esos artículos por una cuestión de subjetivización religiosa. Es de hipócritas decirle a un musulmán que la libertad de expresión está por encima de las creencias religiosas y, cuando ocurre cuarto y mitad de lo mismo con la cristiana, llevarse las manos a la cabeza, desgañitarse y golpear con furia el bajo vientre a ver si la próstata coge fuerza. Es, una vez más, la exposición de la falta de coherencia de una derecha inconsecuente y gritona a la que, como siempre, no le duelen prendas en repetir eso de "en donde dije digo, digo Diego".
Todo este folletín viene por unas fotos del artista M. Montoya, del año 2003 - claro que el 2003 no era año de elecciones municipales o autonómicas y, por lo tanto, su publicación pasó sin pena ni gloria para el elenco político cristiano radical-. Ahora sí es año de elecciones y, en su enfermiza percepción de la realidad, sí es momento de sacarlo a colación. Junto a esta derecha pseudo ofendida por la foto del cristo transexual de Montoya está, también a destiempo, los obispos y la "alianza evangélica", los talibanes cristianos que adoctrinan niños en Estados Unidos enseñándoles fotos de fetos para "demostrarles" que el aborto es un crimen - ¿No he leído yo algo parecido de una profesora de la Comunidad de Madrid?-. Digo yo que como eso de la excomunión no es algo que preocupe a la peña y los autos de fe están de capa caída... desde 1826, pues esperan que el Estado les sirva de cojín y la emprenda con cada cual que escriba, pinte o fotografíe lo que le venga en gana. Lo que estos obispos nuestros no hacen es irse a un juzgado, vamos, que tontos no son y eso de terminar pagando costas de juicio como que no les va. Les va más dejar que se amenace de muerte al artista. El pobre Montoya recibe amenazas desde que el PP ha decidido jugar con el sentimiento religioso de la gente y los obispos han recuperado la memoria. ¿Casualidad? lo dudo. Más bien es que los soldados de cristo resucitan como el KKK cuando la derecha toca a rebato.
Luego se extrañan de que les menten eso de que son herederos del nazionalcatolicismo. Esperemos que, por lo menos a estos, no les dé por quemar nada (cruces incluidas). Sería bueno que alguien le recordara a los señores obispos que el Estado no está para defender sus posiciones religiosas, sino los derechos de todos, entre los que se encuentran la libertad de expresión, de crítica y de ridiculización de la religión, si así se desea. Si piensan que alguno de estos derechos vulneran algo que les competa, no lo duden, acudan a los tribunales. Señores de la derecha, sino les gusta una foto, no la miren, sino les gusta una película, no vayan a verla, sino les gusta una obra de teatro, no acudan al estreno, pero los demás tenemos todo el derecho del mundo a hacerlo si así nos da la real gana.
Ah, eso sí, aplíquense el cuento, en caso de que no estén de acuerdo acudan a los tribunales, o váyanse a...
Suena de fondo "God save the Queen", de los Sex Pistols.
Buenas noches, y buena suerte...