El Real Madrid, tras perder su condición de invicto frente al Akasvayu y Pamesa en dos encuentros consecutivos, ha reaccionado de la mano de su envalentonadísima afición para solventar con oficio un duro envite ante un Joventut que supo afrontar gran parte del encuentro sin su gran estrella, Rudy Fernández.

FICHA TÉCNICA 95- Real Madrid: Tunceri (-), Tomas (7), Smith (10), Hervelle (13), Varda (-) -cinco inicial-, Reyes (21), Bullock (26), Hernández-Sonseca (9) y N'Guema (9). 91- DKV: Bennett (3), Fernández (9), Gaines (13), Barton (15), Archibald (5) -cinco inicial-, Vázquez (11), Dueñas (2), Rubio (5), Huertas (9), Flis, Betts (7) y Laviña (14). Parciales: 25-18, 54-36, 72-55 y 95-91. Árbitros: De la Maza, Guirao y Jiménez. Excluyeron por personales a Tomas (m.38), Huertas (m.38), Archibald (m.38). Incidencias: 12.000 espectadores en Vistalegre. DATOS DESTACABLES Lo mejor: El espíritu madridista vuelve Al Madrid le sienta de lujo jugar en casa. Hicieron olvidar las lesiones. Lo peor: Ratko Varda Sorprendió -positivamente- a propios y extraños tras su llegada. Ahora, ha bajado ostensiblemente su nivel de juego. El dato: El Madrid continúa invicto en Vistalegre.

Antonio Martín / Enviado especial

Se trataba de una difícil prueba para el conjunto local y la ha superado con nota. Aunque la tónica general del encuentro ha deparado determinantes actuaciones por parte de los pilares ofensivos del Real Madrid (Felipe, 21; Bullock, 26), el conjunto de Joan Plaza ha dejado entrever algunas de las fisuras que propiciaron, en los dos últimos encuentos ligueros, las derrotas que afearon su registro inmaculado.

Y es que, claramente, el bajón de Ratko Varda está siendo espectacular, y en consecuencia, está minando la confianza de Plaza en el jugador. La prueba más evidente de ello fue que, como pívot titular, tardó exactamente cincuenta y tres segundos en visitar el banquillo por vez primera tras cometer una falta infantil bajo aro.

Por otra parte, la actitud de Marko Tomas, cada vez más centrado en labores defensivas, no deja lugar a dudas sobre su timidez a la hora de tomar decisiones en ataque, aunque finalmente lograra despertar en los últimos instantes con dos triples marca de la casa. Es hora de que el croata se reivindique, ahora que Mumbrú permanecerá lesionado las próximas semanas.

En cambio, hay factores en este equipo que no mutan. Reyes, en un magnífico estado de forma, hizo lo que quiso con sus contrincantes y dejó para el recuerdo un estratosférico mate a canasta pasada por encima de Roberto Dueñas. Otro rayo que no cesa es Bullock, espléndido en el tiro. Ambos resultaron fundamentales para que al descanso, los madridistas disfrutaran de una cómoda renta de 18 puntos (54-36).

La brecha aumentó hasta los 25 (70-45) y, entonces, volvió a aparecer uno de los males de este equipo: la relajación antes de tiempo. Con Rudy apartado por lesión, la responsabilidad en ataque la tomaron Paco Vázquez y Ferrán Laviña, quienes junto a Lubos Barton, redujeron la distancia a base de triples. Las constantes alternativas en defensa del bloque de Badalona, brillantemente dirigido por Aíto, puso en serios aprietos a los locales en el último cuarto, al que llegaron con opciones de victoria.

Mientras el partido entraba en su recta final, con Elmer Bennett lesionado en la espalda y recibiendo una gran ovación por parte de su antigua afición, dos hombres destacaban por ambos bandos: Axel Hervelle por los locales -incansable, ejemplar-, y Ricky Rubio, que mostró un descaro impresionante.

Charles Gaines, inadvertido hasta entonces, se convirtió en el amo de los tableros y sus rechaces proporcionaron a sus compañeros numerosas segundas opciones en ataque. El DKV apretó en defensa. El Madrid se había ido del partido, pero no lo suficiente como para perderlo. Los tiros libres iban a sentenciar, y ahí el Madrid no perdonó.

SALA DE PRENSA
Joan Plaza (entrenador R.Madrid) "He dicho muchas veces que las derrotas son parte de la formación del carácter de un equipo. Creo que las dos derrotas consecutivas, contra tercero y sexto, estuvieron peleadas y con opciones de ganar hasta el final”.	Reyes (capitán R.Madrid) "Sabíamos que DKV es un equipo que presiona mucho y roba muchos balones. Al final nos hemos desconcentrado un poco y han recortado distancias. Cuando se han puesto a cinco puntos hemos tenido algo de miedo, después de ir ganando de 20".