El equipo rojiblanco acudió a la cita con la lección bien aprendida. Si en la campaña pasada una memorable parada de Willy Caballero a tiro de Adrián impidió que los colchoneros se proclamasen campeones de liga en casa, en esta ocasión los de Simeone no saltaron al campo agarrotados; ni tampoco se descompusieron como en Anoeta. No acusaron las bajas de Miranda y Siqueira – puestos bien cubiertos por Giménez y Ansaldi -, y mantuvieron sus señas de identidad que doblegan a sus contrincantes sobre todo en el Calderón. Ni siquiera que Gabi jugase el peor partido que se recuerda desde que debutó en el primer equipo minó la moral de los atléticos.

Esta vez marcó Tiago de cabeza a pase de Koke; Griezmann aprovechó una mágica jugada de Arda Turan, y Godín sentenció con la testa como si de un ariete se tratase, El francés definitivamente va camino de responder a las expectativas que el club puso en él, no sólo por el gol, también por la cantidad de desmarques y participación que tuvo durante todo el encuentro. El técnico colchonero sin duda supo concentrar a los suyos tras el parón largo de la liga.

Simeone, sin duda, es muy consciente de la dificultad que entrañan estos partidos, y supo transmitirlo a los suyos. El Málaga optaba a superar a los locales en la tabla si se imponía a domicilio en el Vicente Calderón pero los de Javi Gracia no respondieron a tremenda expectativa. Por mucho que el planteamiento inicial se trastocase con el gol tempranero de Tiago, para obtener algo positivo en el campo del Atlético hay que tener capacidad de reacción, porque sino los locales… Te matan.

Ni siquiera en los ratos de relajo que se permitió el Atlético, con una renta de dos goles a su favor, los malagueños inquietaron la portería de Moyá. Sólo una acción propia de un zorro viejo como Roque Santa Cruz, acortó distancias que en principio parecían insalvables. Antes de este traspiés, ni el exceso de tranquilidad rojiblanco, que reservó a Mario Mandzukic para dar una nueva oportunidad al Raúl Jiménez cuando faltaba más media hora para lo conclusión del encuentro… metió al Málaga en el encuentro.

Cabe escribir que el mexicano sigue con la pólvora mojada, falló una clarísima ocasión a centro de Ansaldi y pecó de individualismo en lugar de asistir a Arda Turan para que el turco anotase un 3-1 que hubiese resultado definitivo. El marcar dos goles con su selección contra Bielorrusia esta semana no le ha dado la confianza suficiente para cumplir con su compromiso de goleador. La expulsión de Samuel facilitó más todavía la misión al Atlético que le faltó definir en las numerosas contras de las que dispuso. Sin el 9 croata en el césped al club rojiblanco le cuesta sentenciar., Hoy por hoy no hay un relevo de garantías en este puesto, lo que en una temporada tan larga resulta preocupante. La variedad de recursos con los que cuentan los pupilos del Cholo corrige este desajuste con el que convivirán todo el año a menos que algunos suplentes aprovechen las oportunidades infinitas que les otorga el cuerpo técnico rojiblanco. Algo a priori improbable.

No tuvo la opción de reivindicarse Cerci, Tras alimentar los rumores de una posible salida por sus declaraciones en Italia, no disfrutó de unos minutos en los que podría haber exhibido su clase. Todo apunta a una recriminación por su actitud, un golpe de autoridad de la verdadera estrella de este equipo: Diego Pablo Simeone. Si este miércoles no sale de titular contra el Olympiakos o el próximo domingo ante el Deportivo, aumentaran las sospechas de una salida antes de lo previsto.

En definitiva, satisfacción para el Atlético de Madrid, Que doblegó a uno de esos huesos de la liga española que no está en las apuestas para terminar entre los cuatro primeros pero que amargará a buen seguro la tarde a aquellos conjuntos que aspiren a situarse en lo más alto de la tabla, La próxima semana, el conjunto local gozará de la oportunidad de consolidar su buena situación que jornada a jornada le sitúan como aspirante al título tras el Real Madrid y FC Barcelona.