Los padres de los 43 estudiantes desaparecidos en el municipio de
Iguala se han reunido este miércoles con el presidente de México,
Enrique Peña Nieto, y han firmado una serie de acuerdos tras aprobar un
plan renovado de búsqueda. Sin embargo, los familiares de los
'normalistas' han advertido de que "no es suficiente".
El mandatario mexicano y los padres de los desaparecidos han acordado
fortalecer esfuerzos para encontrarlos con vida, a través de un
acuerdo en el que se da respuesta a los diez puntos que presentaron los
familiares de los 'normalistas' al inicio del encuentro a modo de peticiones
directas a Peña Nieto.
Este documento, que también ha sido firmado por el secretario de Gobernación, Miguel
Ángel Osorio Chong y por el titular de la Procuraduría General de la República (PGR),
Jesús Murillo Karam, contempla la creación de una comisión mixta de seguimiento e
información integrada por PGR, SEGOB y los propios padres de familia.
Asimismo, el Gobierno se compromete a fortalecer los esfuerzos de localización con
un plan renovado de búsqueda; dispensar atención integral y apoyo a las familias de las seis
personas que perdieron la vida en los enfrentamientos registrado el 26 de septiembre --
previos a las desapariciones--; y garantizar el apoyo a las escuelas normales rurales del
país, entre otras medidas.
Al término del encuentro, el presidente ha prometido ir "hasta el final de las
investigaciones" para hallar a los estudiantes, "dar con los responsables y aplicar la ley
tope donde tope", tal y como publica el diario mexicano 'Milenio'.
Por su parte, pese a celebrar la firma del citado acuerdo, Felipe de la Cruz, portavoz de
los familiares de los 'normalistas' desaparecidos, ha avanzado --en declaraciones a
'Milenio'-- que el acuerdo alcanzado este miércoles con Peña Nieto "no es suficiente". Por
el momento no ha facilitado más explicaciones al respecto.
UN MES SIN NOTICIAS
Los 43 'normalistas' desaparecieron entre el 26 y el 27 de septiembre en el marco de
una protesta contra al reforma educativa del Gobierno mexicano que desembocó en
violentos enfrentamientos con la Policía que se saldaron con seis muertos y 25 heridos.
La PGR ha confirmado que el Gobierno y la Policía de Iguala estaban confabulados
con el 'mini-cártel' Guerreros Unidos para hacer desaparecer a estos 43 'normalistas',
por lo que las autoridades mexicanas intentan identificarlos entre los restos hallados en fosas
comunes.
La PGR ha emitido órdenes de captura contra el exalcalde de Iguala, José Luis
Abarca, y su mujer, que están en paradero desconocido. También acusa de este crimen al
jefe de sicarios 'El Gil', así como al secretario de Seguridad Pública y al subjefe de la
Policía municipal, Felipe Flores Velázquez y César Navas González.