Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Salud
Etiquetas | Transtorno bipolar
Tiende a confundirse con la depresión

Más de 140 millones de personas padecen trastorno bipolar en el mundo

|

Aproximadamente, según las últimas referencias publicadas -Informe del Fondo Alemán sobre la población de la Tierra- la población mundial es de alrededor de 7,2 mil millones de personas. Un porcentaje cercano al 2 por ciento de los habitantes del planeta (144.000.000) padecen trastorno bipolar, una enfermedad psiquiátrica que afecta a las emociones.

170914salud

Esta realidad ha sido descrita por Eduard Vieta, jefe de Servicio de Psiquiatría y Psicología del Hospital Clínic de Barcelona, durante una mesa monográfica sobre el trastorno bipolar que ha tenido lugar en el XVI Congreso Mundial de Psiquiatría que se celebra en Madrid hasta este jueves, día 14 de septiembre.

Vieta, que es además coordinador del Área de investigación en Trastorno Bipolar del Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (CIBERSAM) y profesor de la Universidad de Barcelona, es el principal investigador español dedicado al trastorno bipolar. En este sentido, ha explicado que el trastorno bipolar “es una disfunción de los mecanismos cerebrales que regulan el estado de ánimo”. “Por esta razón, se le conoce como la enfermedad de las emociones”.

En concreto, ha aclarado que consiste en “la presencia de cambios de humor pronunciados y frecuentes, desde fases de depresión a fases de manía (hiperactividad), que afectan profundamente a la calidad de vida de quienes lo padecen”, siendo una de las principales enfermedades causantes de discapacidad, según el Estudio Global de Enfermedades de la Organización Mundial de la Salud (OMS). “Nuestras emociones, sentimientos, no solo dependen de factores externos, sino también de mecanismos biológicos”, ha agregado el especialista.

En la sociedad en general hay mucha confusión en cuanto al trastorno bipolar y tiende a confundirse con la depresión, al tiempo que es una enfermedad muy estigmatizada por los prejuicios que generan los trastornos psiquiátricos. Las personas con trastorno bipolar no tienen problemas en su mente. Tienen un problema físico en su cerebro que les hace cambiar, fuera de su voluntad, de estado de ánimo en muy poco tiempo.

“Pese a ser una enfermedad muy desconocida, es más prevalente que otras enfermedades (físicas) como el sida, la esclerosis múltiple o otras (psíquicas) como la esquizofrenia o la anorexia nerviosa, entre otras”, ha descrito Vieta.

Los medicamentos son una parte fundamental del tratamiento del trastorno bipolar. Se emplean estabilizadores del estado de ánimo, los cuales ayudan a evitar los altibajos en el estado anímico. Asimismo, también se utiliza la psicoterapia o la terapia electroconvulsiva cuando en la fase de la depresión no hay respuesta de los medicamentos.

TRATAMIENTOS DE FUTURO
En cuanto a los avances en el tratamiento de la enfermedad, el experto ha avanzado que “los mayores avances se están produciendo en el ámbito de la medicina personalizada, que abarca novedades en el campo de la genética, la neuroimagen, los biomarcadores, la estadificación de la enfermedad, los síntomas clínicos y neurocognitivos, la comorbilidad, la polaridad predominante, y sus implicaciones terapéuticas, como el índice de polaridad”.

En este contexto ha afirmado que “dado que los ensayos clínicos ofrecen una información mucho más centrada en el fármaco que en el paciente, y que no hay enfermedades sino personas que las sufren, cada una con sus peculiaridades, la investigación avanza buscando formas de predecir cuál es el tratamiento ideal para cada paciente individual, huyendo de las medias que no representan a nadie en particular”.

Más de 140 millones de personas padecen trastorno bipolar en el mundo

Tiende a confundirse con la depresión
Francisco Acedo
miércoles, 17 de septiembre de 2014, 07:16 h (CET)
Aproximadamente, según las últimas referencias publicadas -Informe del Fondo Alemán sobre la población de la Tierra- la población mundial es de alrededor de 7,2 mil millones de personas. Un porcentaje cercano al 2 por ciento de los habitantes del planeta (144.000.000) padecen trastorno bipolar, una enfermedad psiquiátrica que afecta a las emociones.

170914salud

Esta realidad ha sido descrita por Eduard Vieta, jefe de Servicio de Psiquiatría y Psicología del Hospital Clínic de Barcelona, durante una mesa monográfica sobre el trastorno bipolar que ha tenido lugar en el XVI Congreso Mundial de Psiquiatría que se celebra en Madrid hasta este jueves, día 14 de septiembre.

Vieta, que es además coordinador del Área de investigación en Trastorno Bipolar del Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (CIBERSAM) y profesor de la Universidad de Barcelona, es el principal investigador español dedicado al trastorno bipolar. En este sentido, ha explicado que el trastorno bipolar “es una disfunción de los mecanismos cerebrales que regulan el estado de ánimo”. “Por esta razón, se le conoce como la enfermedad de las emociones”.

En concreto, ha aclarado que consiste en “la presencia de cambios de humor pronunciados y frecuentes, desde fases de depresión a fases de manía (hiperactividad), que afectan profundamente a la calidad de vida de quienes lo padecen”, siendo una de las principales enfermedades causantes de discapacidad, según el Estudio Global de Enfermedades de la Organización Mundial de la Salud (OMS). “Nuestras emociones, sentimientos, no solo dependen de factores externos, sino también de mecanismos biológicos”, ha agregado el especialista.

En la sociedad en general hay mucha confusión en cuanto al trastorno bipolar y tiende a confundirse con la depresión, al tiempo que es una enfermedad muy estigmatizada por los prejuicios que generan los trastornos psiquiátricos. Las personas con trastorno bipolar no tienen problemas en su mente. Tienen un problema físico en su cerebro que les hace cambiar, fuera de su voluntad, de estado de ánimo en muy poco tiempo.

“Pese a ser una enfermedad muy desconocida, es más prevalente que otras enfermedades (físicas) como el sida, la esclerosis múltiple o otras (psíquicas) como la esquizofrenia o la anorexia nerviosa, entre otras”, ha descrito Vieta.

Los medicamentos son una parte fundamental del tratamiento del trastorno bipolar. Se emplean estabilizadores del estado de ánimo, los cuales ayudan a evitar los altibajos en el estado anímico. Asimismo, también se utiliza la psicoterapia o la terapia electroconvulsiva cuando en la fase de la depresión no hay respuesta de los medicamentos.

TRATAMIENTOS DE FUTURO
En cuanto a los avances en el tratamiento de la enfermedad, el experto ha avanzado que “los mayores avances se están produciendo en el ámbito de la medicina personalizada, que abarca novedades en el campo de la genética, la neuroimagen, los biomarcadores, la estadificación de la enfermedad, los síntomas clínicos y neurocognitivos, la comorbilidad, la polaridad predominante, y sus implicaciones terapéuticas, como el índice de polaridad”.

En este contexto ha afirmado que “dado que los ensayos clínicos ofrecen una información mucho más centrada en el fármaco que en el paciente, y que no hay enfermedades sino personas que las sufren, cada una con sus peculiaridades, la investigación avanza buscando formas de predecir cuál es el tratamiento ideal para cada paciente individual, huyendo de las medias que no representan a nadie en particular”.

Noticias relacionadas

La Sociedad Española de Neurología (SEN) acaba de poner en marcha incubaSEN, la primera incubadora de startups del mundo creada en el seno de una sociedad científica de Neurología clínica y la primera de una sociedad científica española. Su finalidad es fomentar que las soluciones tecnológicas que puedan aplicarse en el ámbito clínico surjan de necesidades concretas y relevantes detectadas desde la Neurología.

Los españoles pasan una media de 1.760 horas al año en el trabajo. Ir a trabajar forma parte de la rutina diaria de millones de personas, pero la productividad depende en gran medida del entorno profesional y del ambiente en el que se desenvuelven los trabajadores, que en ocasiones repercute en su bienestar y va más allá de la jornada laboral.

Cada vez más personas son conscientes del impacto positivo que tiene el deporte en sus vidas. Mantenerse activo y saludable es fundamental a cualquier edad. A partir de los 40 años, comenzamos a experimentar una pérdida de masa muscular, así como una disminución en la densidad ósea, lo que puede aumentar el riesgo de lesiones y enfermedades crónicas, al tiempo que disminuye nuestra calidad de vida.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto