Parece mentira que un club como el Real Madrid no tenga más que un disgusto tras otro en los últimos cuatro años. Con nada menos que siete entrenadores, ningún título, juego pobre y lo que es peor mal ambiente dentro del vestuario.

La decadencia de la nave blanca empezó con la marcha de Vicente Del Bosque en el 2003, un entrenador que estuvo en su segunda etapa el banquillo blanco nada menos que tres años y siete meses, donde levanto la friolera de dos copas de Europa, dos ligas, una intercontinental, una súper copa de Europa y un súper copa de España.

En estos últimos años no ha habido más que problemas en las oficinas del Bernabéu. Falta de compañerismo entre los jugadores donde se pudo ver las discrepancias entre Ronaldo y Raúl.

El año pasado fue el año donde todo se desbordo. Un año donde el eterno rival, el F. C. Barcelona, alzaba su segunda copa de Europa con un exquisito fútbol. Ese mismo año en esa misma competición Ronaldo salió en la rueda de prensa de la Champions para manifestar que no se sentía querido por la afición y que en Madrid el brasileño estaba tiste. Unas declaraciones que dejaban ver lo que se cocía dentro del club merengue. Unos meses más tarde el club recibía otro mazazo, la marcha de su presidente. Florentino abandonaba la nave blanca con la escusa de haber mimado a sus jugadores. El ex presidente se fue con la intención de enderezar el club, pero ni mucho menos fue así, su marcha provocó que el club se desplomara como las torres gemelas el 11 de septiembre.

Tras la marcha de Florentino llego Fernando Martin, persona elegida a dedo por el propio ex presidente. El afán de protagonismo de este y el descontento de la mayoría de los socios blancos al no haber sido a quien se voto en su día, llevo al club a unas elecciones anticipadas el pasado verano, pero eso si antes Martín presentó se carta de dimisión y Montejano haría las veces de presidente hasta las nuevas elecciones. Unas elecciones que no hicieron más que ensuciar la imagen del Real Madrid por todo el mundo. Candidatos que luchaban más por anular el voto por correo que por devolver al Real Madrid el prestigio perdido en estos últimos años.

Al final llego el señor Calderón a la presidencia (cuarto presiente blanco en menos de un año) con promesas que nunca cumplió y con la disputa hasta hoy por saber que paso con esos votos por correo, una incógnita que podría llevar al club el próximo verano a unas nuevas elecciones.

Pero ahí no queda todo, después de intentar hacer un equipo competitivo con un entrenador nuevo, surge el menos precio de un jugador hacia su entrenador (caso Cassano) ensuciando más si se puede la imagen del equipo madrileño. Y ahora para más inri sale el señorito Ronaldo diciendo que "Si Capello creyera en mí ya me habría puesto”, que no es feliz y que le han quitado la vida”. Un club que cada día que pasa empeora más, su juego escasea y no deja de ser la casa de los líos. Ya lo dijo John Toshack ojala todos tuvieran los mismos problemas que el señor Capello “que tanto se queja de todo. Cuando veo el banquillo de su equipo, me entra la risa floja”. John, ojala fuese solo ese el problema del Real Madrid pero a estas alturas me da que es mucho más complejo que eso.