Oklahoma City Thunder mantiene vivas sus esperanzas de jugar por el anillo de la NBA después de igualar esta pasada madrugada la final de la Conferencia Oeste al derrotar en el Chesapeake Energy Arena a San Antonio Spurs por 105-92, liderados por un sensacional Russell Westbrook, que firmó números al alcance de Michael Jordan.
El base fue clave para que los de Scott Brooks vuelvan a Texas, de donde se marcharon con un 2-0 y muy malas sensaciones, con todas sus opciones intactas después de anotar 40 puntos, repartir 10 asistencias y robar cinco balones, cifras que no se conseguían en 'play-off' desde que lo hiciese 'Air Jordan' en 1989 según informó la cadena 'ESPN'.
Además, Westbrook, que se quedó a tres puntos de su mejor anotación en la postemporada, estuvo bastante fino en el lanzamiento, con buenos porcentajes (12/24), y formó una pareja letal con Kevin Durant, de nuevo en su mejor versión, pero que no se pudo acercar al partido de su compañero. Ambos llevaron el peso ofensivo de los locales, con el alero aportando 31 puntos, y combinándose para lanzar en 46 de las 76 ocasiones que lanzaron los Thunder.
Ante esta demostración ofensiva los Spurs no pudieron plantar cara. San Antonio dominó claramente los dos primeros choques de la serie, pero el retorno a su pabellón y la vuelta de Serge Ibaka han igualado las cosas, dando una mayor fortaleza a Oklahoma, sobre todo por dentro por donde Tim Ducan ya no se mueve con tanta comodidad. El hispano-congoleño hizo nueve puntos, pero fue un pilar defensivo con ocho rebotes y tres tapones.
Los de Gregg Popovich no pudieron contener en defensa ni a Westbrook ni a Durant, que en la primera mitad ya hicieron mucho daño. Los visitantes aguantaron hasta mediado el segundo cuarto cuando empezaron a sufrir recibiendo un parcial de 22-13 que les hizo marcharse muy por detrás a los vestuarios (58-43).
Los Spurs tampoco encontraron la fórmula tras el descanso, lastrado por el flojo partido en ataque de Tony Parker y por sus porcentajes de tiro que no llegaron al 40 por ciento. Los Thunder no desaprovecharon la ocasión para sentenciar antes de los últimos doce minutos (76-49) y enviar un mensaje claro de que amenazan con repetir lo de 2012 cuando levantaron otro 2-0 adverso ante su rival.
Oklahoma City Thunder mantiene vivas sus esperanzas de jugar por el anillo de la NBA después de igualar esta pasada madrugada la final de la Conferencia Oeste al derrotar en el Chesapeake Energy Arena a San Antonio Spurs por 105-92, liderados por un sensacional Russell Westbrook, que firmó números al alcance de Michael Jordan.
El base fue clave para que los de Scott Brooks vuelvan a Texas, de donde se marcharon con un 2-0 y muy malas sensaciones, con todas sus opciones intactas después de anotar 40 puntos, repartir 10 asistencias y robar cinco balones, cifras que no se conseguían en 'play-off' desde que lo hiciese 'Air Jordan' en 1989 según informó la cadena 'ESPN'.
Además, Westbrook, que se quedó a tres puntos de su mejor anotación en la postemporada, estuvo bastante fino en el lanzamiento, con buenos porcentajes (12/24), y formó una pareja letal con Kevin Durant, de nuevo en su mejor versión, pero que no se pudo acercar al partido de su compañero. Ambos llevaron el peso ofensivo de los locales, con el alero aportando 31 puntos, y combinándose para lanzar en 46 de las 76 ocasiones que lanzaron los Thunder.
Ante esta demostración ofensiva los Spurs no pudieron plantar cara. San Antonio dominó claramente los dos primeros choques de la serie, pero el retorno a su pabellón y la vuelta de Serge Ibaka han igualado las cosas, dando una mayor fortaleza a Oklahoma, sobre todo por dentro por donde Tim Ducan ya no se mueve con tanta comodidad. El hispano-congoleño hizo nueve puntos, pero fue un pilar defensivo con ocho rebotes y tres tapones.
Los de Gregg Popovich no pudieron contener en defensa ni a Westbrook ni a Durant, que en la primera mitad ya hicieron mucho daño. Los visitantes aguantaron hasta mediado el segundo cuarto cuando empezaron a sufrir recibiendo un parcial de 22-13 que les hizo marcharse muy por detrás a los vestuarios (58-43).
Los Spurs tampoco encontraron la fórmula tras el descanso, lastrado por el flojo partido en ataque de Tony Parker y por sus porcentajes de tiro que no llegaron al 40 por ciento. Los Thunder no desaprovecharon la ocasión para sentenciar antes de los últimos doce minutos (76-49) y enviar un mensaje claro de que amenazan con repetir lo de 2012 cuando levantaron otro 2-0 adverso ante su rival.
El Betis Baloncesto falló en el momento clave. O, mejor dicho, un Covirán Granada guerrero y voluntarioso le hizo fallar, hasta el punto de meterlo en un lío del que probablemente no vaya a salir. Los granadinos, que perdían hasta por nueve puntos a menos de cuarto y medio para el final, se repusieron hasta el punto de lograr una victoria que le deja con más vida aún de lo que ya parece. El Betis depende de sí mismo pero tendrá que ganar nada menos que en Madrid si no quiere consumar el descenso.
El Betis Baloncesto ha caído esta tarde en San Pablo ante el Barça, cuya victoria le sirve para mantener el liderato de la liga ACB justo antes de desplazarse a Kaunas para intentar certificar su clasificación para la "Final Four" de la Euroliga. Los verdiblancos, muy laxos y endebles durante la primera mitad, han llegado demasiado tarde al choque y, cuando han despertado, ya era demasiado tarde para intentar apretar de verdad. Pese a ello la derrota previa del Covirán Granada le sirve para permanencer fuera del descenso,
El Betis Baloncesto ha conseguido esta noche una victoria tan necesaria como ciertamente engañosa frente al colista de la liga ACB, el Carplus Fuenlabrada que, pese a sumar solamente cuatro triunfos y ponerse veinte abajo en el segundo cuarto, le ha peleado el triunfo a los de Casimiro -aunque sin llevarles al límite- casi hasta el final.
