Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | La tronera
Estamos ante la mejor ocasión de romper con el bipartidismo; una fórmula que ya no sirve por haberse mostrado engañosa y detractora de los intereses nacionales

Voto útil o inútil

|

Se acercan las elecciones europeas y ya han salido a la palestra quienes empiezan a dar la matraca sobre el “voto útil”. Esta expresión se ha extendido tanto y de forma tan torticera que ya nadie sabe lo que significa. Es bien sabido que cada partido piensa que el voto útil es el que se deposita en la urna con sus siglas y, sin embargo, a la vista de la corrupción y de la degradación política española, la ciudadanía suele pensar que el voto útil no existe, porque en una partidocracia donde cada formación ‘trabaja’ para sí misma y no para la ciudadanía.

Si algún proceso electoral tiene baja estima – que hoy suelen tenerlo todos en España—son las elecciones europeas las que menos interés tienen para el ciudadano, porque Europa está muy lejos y no llega al ciudadano, excepto para meterle mano en el bolsillo, argumentar que deben bajarse los sueldos y apoyar a la banca en detrimento del ahorrador. Sirva como ejemplo que lo que va de legislatura pasará a la historia de la Unión Europea como los años de crisis en los que se benefició a la banca y se autorizó a sacrificar los ahorros de la ciudadanía en beneficio de la banca ‘manirrota’, torticera, desorganizada y, en muchos casos, egoísta, impostora y fraudulenta.

De cara a las elecciones europeas, a celebrar el próximo 25 de mayo, los votantes van a tener en cuenta muchos temas que han hecho daño al desarrollo de las colectividades e incluso personalmente. Estamos ante la mejor ocasión de romper con el bipartidismo; una fórmula que ya no sirve por haberse mostrado engañosa y detractora de los intereses nacionales; de la misma forma que no sirven los nacionalismos en versión independentista, por su evidente incapacidad. El voto útil, en esta ocasión, es el que no se deposita.

Lo ideal sería votar a quienes tienen un claro peso para resolver problemas de la agricultura, ganadería, minería, desempleo,… Lo de menos es el color. Lo que tenemos no nos sirve y lo que hemos visto es caduco y, en ocasiones, miserable. Lo peor que ha hecho la UE en el tiempo reciente ha sido consentir que la banca española echara mano de los ahorros (quitas) de los ciudadanos, tanto en preferentes como en subordinadas, para evitar inyecciones económicas de otro tipo. A eso se llama desprecio, indignidad, irresponsabilidad, exceso de ocio, egoísmo y mala fe.

De momento, para muchos ciudadanos esa fecha de las elecciones europeas es una fecha tachada en el calendario. No la tendremos en cuenta. Y nos gustaría que esa idea se extendiera. Votar a quienes al día siguiente hacen daño a quienes han pedido el voto es pura excentricidad y maldad. Por eso… ¡que les den! En la mayoría de los casos la presencia española es casi testimonial; no hay más que preguntárselo al señor Almunia. ¡Dios nos coja confesados o en buena postura ante la que se avecina!

Voto útil o inútil

Estamos ante la mejor ocasión de romper con el bipartidismo; una fórmula que ya no sirve por haberse mostrado engañosa y detractora de los intereses nacionales
Jesús  Salamanca
miércoles, 23 de abril de 2014, 06:16 h (CET)
Se acercan las elecciones europeas y ya han salido a la palestra quienes empiezan a dar la matraca sobre el “voto útil”. Esta expresión se ha extendido tanto y de forma tan torticera que ya nadie sabe lo que significa. Es bien sabido que cada partido piensa que el voto útil es el que se deposita en la urna con sus siglas y, sin embargo, a la vista de la corrupción y de la degradación política española, la ciudadanía suele pensar que el voto útil no existe, porque en una partidocracia donde cada formación ‘trabaja’ para sí misma y no para la ciudadanía.

Si algún proceso electoral tiene baja estima – que hoy suelen tenerlo todos en España—son las elecciones europeas las que menos interés tienen para el ciudadano, porque Europa está muy lejos y no llega al ciudadano, excepto para meterle mano en el bolsillo, argumentar que deben bajarse los sueldos y apoyar a la banca en detrimento del ahorrador. Sirva como ejemplo que lo que va de legislatura pasará a la historia de la Unión Europea como los años de crisis en los que se benefició a la banca y se autorizó a sacrificar los ahorros de la ciudadanía en beneficio de la banca ‘manirrota’, torticera, desorganizada y, en muchos casos, egoísta, impostora y fraudulenta.

De cara a las elecciones europeas, a celebrar el próximo 25 de mayo, los votantes van a tener en cuenta muchos temas que han hecho daño al desarrollo de las colectividades e incluso personalmente. Estamos ante la mejor ocasión de romper con el bipartidismo; una fórmula que ya no sirve por haberse mostrado engañosa y detractora de los intereses nacionales; de la misma forma que no sirven los nacionalismos en versión independentista, por su evidente incapacidad. El voto útil, en esta ocasión, es el que no se deposita.

Lo ideal sería votar a quienes tienen un claro peso para resolver problemas de la agricultura, ganadería, minería, desempleo,… Lo de menos es el color. Lo que tenemos no nos sirve y lo que hemos visto es caduco y, en ocasiones, miserable. Lo peor que ha hecho la UE en el tiempo reciente ha sido consentir que la banca española echara mano de los ahorros (quitas) de los ciudadanos, tanto en preferentes como en subordinadas, para evitar inyecciones económicas de otro tipo. A eso se llama desprecio, indignidad, irresponsabilidad, exceso de ocio, egoísmo y mala fe.

De momento, para muchos ciudadanos esa fecha de las elecciones europeas es una fecha tachada en el calendario. No la tendremos en cuenta. Y nos gustaría que esa idea se extendiera. Votar a quienes al día siguiente hacen daño a quienes han pedido el voto es pura excentricidad y maldad. Por eso… ¡que les den! En la mayoría de los casos la presencia española es casi testimonial; no hay más que preguntárselo al señor Almunia. ¡Dios nos coja confesados o en buena postura ante la que se avecina!

Noticias relacionadas

Alberga la voz protocolo acepciones varias. La cuarta de ellas, siguiendo al DRAE, define esta palabra como ”secuencia detallada de un proceso de actuación científica, técnica, médica, etc.”. Al parecer, todo protocolo supone una garantía para evitar decisiones improvisadas en los distintos ámbitos y tranquilizar, de paso, a los destinatarios de la actuación, que pueden ser los miembros de un colectivo concreto o, en algunos casos, toda la población.

Si algo nos va quedando claro, es la enorme complicación de la cual formamos parte activa. El cielo nos plantea retos de altura si queremos ser consecuentes y la materia resulta muy superficial, la mayor parte es indetectable en el Universo como materia oscura. Las energías y las condensaciones nos traen de cabeza, hasta el punto de que avanzamos sin avanzar, de ver sin ver, o muchas situaciones similares.

Hoy comienzan las elecciones en la India. Están habilitados para votar más de 960 millones de habitantes en comicios de formato singular que van a durar 44 días. El país encarna la mayor democracia del mundo y, a diferencia de lo que suele acontecer en occidente, se espera un incremento del número de ciudadanos que acudan a las urnas.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto