La selección española Sub-21 se impuso a Alemania (2-0) en un partido amistoso celebrado en Palencia, un encuentro en el que los de Julen Lopetegui fueron mejores y que finiquitaron gracias a dos goles en dos minutos de Morata e Isco Alarcón, pero que cerró con la mala noticia de la lesión de Alberto Moreno, que sufre una contractura en el trapecio.
La selección de Lopetegui reventó el partido en apenas dos minutos. En el 52, Morata aprovechó un error del guardameta alemán, Leno, para inaugurar el marcador. Con este gol, el madrileño suma ya 13 con la Sub-21. Incluso pudo sumar alguno más, pero los palos -hasta en tres ocasiones- le impidieron aumentar su cuenta.
Apenas un par de minutos después del gol de Morata, otro madridista, Isco Alarcón, hizo el 2-0. El malagueño cogió el balón en la frontal y con un disparo seco supero a Leno. Durante los 90 minutos se le notó a Isco que el partido se le quedaba pequeño. El jugador del Real Madrid no tiene hueco de momento en el equipo de Del Bosque, por la abundancia de futbolistas de calidad, pero en Palencia demostró una vez más que por nivel de juego su categoría es la absoluta.
Tras el golpe de los dos goles consecutivos, Alemania, lejos de rendirse se fue al ataque en busca de reducir distancias. Y es que en ningún momento dio el partido la sensación de ser amistoso. Los germanos tenían cuentas pendientes con España desde el europeo del pasado año -España venció a Alemania en la fase de grupos- y desde el inicio se tomaron el partido con una seriedad inhabitual en este tipo de encuentros.
No consiguieron los alemanes ni siquiera hacer un gol y España sumó su encuentro número 33 sin perder y su decimocuarta victoria seguida. La selección de Lopetegui camina rumbo de su tercer Europeo de la categoría consecutivo y no quiere dejarse comer terreno ni en los amistosos.
El encuentro de Palencia solo tuvo un pero: la lesión de Alberto Moreno. El lateral sevillista tuvo que ser cambiado a los 20 minutos tras caer mal en un salto con un jugador alemán y en el descanso se le diagnosticó una contractura en el trapecio. Una lesión, que en cualquier caso, no parece ser grave y, por suerte, el partido se recordará más por la exhibición futbolística de Isco Alarcón.
La selección española Sub-21 se impuso a Alemania (2-0) en un partido amistoso celebrado en Palencia, un encuentro en el que los de Julen Lopetegui fueron mejores y que finiquitaron gracias a dos goles en dos minutos de Morata e Isco Alarcón, pero que cerró con la mala noticia de la lesión de Alberto Moreno, que sufre una contractura en el trapecio.
La selección de Lopetegui reventó el partido en apenas dos minutos. En el 52, Morata aprovechó un error del guardameta alemán, Leno, para inaugurar el marcador. Con este gol, el madrileño suma ya 13 con la Sub-21. Incluso pudo sumar alguno más, pero los palos -hasta en tres ocasiones- le impidieron aumentar su cuenta.
Apenas un par de minutos después del gol de Morata, otro madridista, Isco Alarcón, hizo el 2-0. El malagueño cogió el balón en la frontal y con un disparo seco supero a Leno. Durante los 90 minutos se le notó a Isco que el partido se le quedaba pequeño. El jugador del Real Madrid no tiene hueco de momento en el equipo de Del Bosque, por la abundancia de futbolistas de calidad, pero en Palencia demostró una vez más que por nivel de juego su categoría es la absoluta.
Tras el golpe de los dos goles consecutivos, Alemania, lejos de rendirse se fue al ataque en busca de reducir distancias. Y es que en ningún momento dio el partido la sensación de ser amistoso. Los germanos tenían cuentas pendientes con España desde el europeo del pasado año -España venció a Alemania en la fase de grupos- y desde el inicio se tomaron el partido con una seriedad inhabitual en este tipo de encuentros.
No consiguieron los alemanes ni siquiera hacer un gol y España sumó su encuentro número 33 sin perder y su decimocuarta victoria seguida. La selección de Lopetegui camina rumbo de su tercer Europeo de la categoría consecutivo y no quiere dejarse comer terreno ni en los amistosos.
El encuentro de Palencia solo tuvo un pero: la lesión de Alberto Moreno. El lateral sevillista tuvo que ser cambiado a los 20 minutos tras caer mal en un salto con un jugador alemán y en el descanso se le diagnosticó una contractura en el trapecio. Una lesión, que en cualquier caso, no parece ser grave y, por suerte, el partido se recordará más por la exhibición futbolística de Isco Alarcón.
La gabarra "Athletic" está feliz, puesto que por fin verá finalizada su inactividad de tanto tiempo. Todo ello porque los bilbaínos pusieron fin a su maldición de cuarenta años sin ser campeones de la Copa del Rey, con seis finales perdidas, cinco en los últimos 15 años. El equipo de Valverde debió esperar a la tanda de penaltis para vencer a un combativo Mallorca y alcanzar la gloria, pero esta Copa, "su" Copa más deseada, por fin podrá lucirla ante su gente por la ría de Bilbao.
Una Copa para el Madrid, la 20ª de su historia; una Copa para Rodrygo Goes, MVP y autor de los dos goles que vuelven a dar el título copero a los blancos, nueve años después de aquel recordado triunfo en Mestalla frente al Barça. Y, a la vez, un subcampeonato, el segundo de su historia, con honores de campeón para Osasuna.
El Real Betis Balompié es el campeón de la Copa del Rey. El equipo verdiblanco, en su ciudad, delante de su gente que lo sigue sin rechistar, ha salido victorioso por tercera vez después de una nueva final épica, como todas las que disputa, y en la que un rival tan sumamente digno como el Valencia y que ha merecido la Copa tanto como él solo ha claudicado en la cruel tanda de penaltis.
