El pueblo es sabio, como el entrenador, pero a día de hoy, lo mejor para todos sería abandonar la nave y llenar el país de metas e ilusiones nuevas. Una utopía si repasamos las declaraciones de Aragonés, que no tiene la intención de quedarse en tierra y confía en retomar el vuelo de la selección. Un conjunto de jugadores que vagan por los terrenos de Europa como si no notaran el aliento en la nuca de cuarenta millones de personas, que decepción tras decepción, siguen perdiendo horas de su vida para presenciar los partidos de su país. No puedo contenerme hasta la última línea y lo voy a decir ahora. Damos pena. Lo del sábado no tiene perdón de Dios, no por el tema del entrenador, que no tiene solución. Luís está acaparando todos los males de la selección y los verdaderos culpables parece que no tienen nada que ver. Eso si, todos los jugadores apoyan al técnico para que siga al frente, será porque con patrón nuevo, muchos de los fijos hoy, no volverían a vestirse de corto en mucho tiempo.

Los entrenadores no creo que marquen goles o paren penaltis. Ayudan a plantear una estrategia en la teoría para llevarla a cabo en la práctica, que casi nunca sale como se tiene previsto. Es lo bueno del fútbol, no es una ciencia exacta, y España nos está acostumbrando a perder partidos y realizar actuaciones lamentables en los últimos meses. Ni Casillas, ni Puyol, ni el jugador español más en forma como Villa, evitaron otro ridículo del que sólo sale malparado el que les dice cómo hacer las cosas en el campo. No he oído a nadie culpar el bajo estado de forma de Puyol, que aunque sea el corazón de la selección, es humano, come jamón y va al cuarto de baño como todos. El central no pasa por su mejor momento de forma y descansar le vendría bien al jugador y a la propia selección, Albiol o Javi Navarro podrían ocupar la zaga cumpliendo perfectamente con el rol de central contundente del catalán. Los dos valencianos llaman a la titularidad en el próximo partido.

Tampoco se han oído voces hacia el bajo rendimiento de Iker, que se está ganando descansar un partido y dar la oportunidad a Reina. No creo que el país note la baja del portero, la gente puede ir a trabajar y hacer vida normal, según los entendidos el mundo seguirá dando vueltas y seguirá saliendo el sol. La selección está por encima de todo jugador, sea el que sea, y siempre hay que buscar el beneficio de todos. Por eso, gente nueva al grupo no haría daño a nadie, hace falta sangre y narices nuevas en la selección. Narices las de un jugador que juegue o no, hace falta en la selección. Si se reconoce que no juega bien, reconozcamos que un poco de Raúl hizo falta en Suecia. Es un poco ventajista nombrar ahora al capitán, pero las verdades, si son para ayudar a un equipo roto por todos los lados, bienvenidas sean.