Hablar de que sea una cuestión de vida o muerte lo pase este fin de semana es una hipérbole. No se trata de que un corazón deje de latir, sino de que las esperanzas e ilusiones de la gente se vengan abajo y por partida doble. Por un lado, Alonso se la juega, por otro, la selección española de fútbol también.

Esperemos que el amarillo no sea símbolo de mal agüero, porque lo que necesitan es hacerlo bien y tener el factor suerte a favor. Estamos hablando de un Mundial de Fórmula 1 y una clasificación para la Eurocopa de fútbol. Casi nada que se juegan los españoles este sábado y domingo. Empiezan las apuestas.

Fernando tiene mentalidad de campeón y sólo le hace falta que ni su equipo ni la FIA le echen el campeonato por alto. Tras firmar una tregua con su compañero de equipo, Fisichella, al asturiano le queda mentalizarse de que es mejor que Schumacher y que esta vez todo está en su mano. Hasta el mecánico que falló con la tuerca en el último Gran Premio ha sido apartado de su trabajo. Aquí sabremos si tiene todo el alma de campeón.

Por su parte, la selección es tinta de otro calamar. Aquí no se juegan un segundo puesto, sino simplemente un puesto. Las acusaciones de jugadores contra el seleccionador y las respuestas de éste no vienen muy bien en estos momentos, cuando lo que debería pasar es que la unión entre todos fuese más irrompible que nunca.

Dudo de que la decisión de Aragonés en cuanto a la convocatoria haya sido la más adecuada; es más, pienso que se ha equivocado, pero ya está tomada. Soy “juaquinista”, “vicentista” y “morientista” y sin embargo ninguno estará con la selección. Ahora hay que respetarla y apoyar a “la roja” y dejar los comentarios, que aunque certeros, no vienen a cuento en este momento tan complicado.

Qué paradoja. Este fin de semana tendremos que animar al que lleva los colores amarillo y azul y tendremos que desear que pierda el equipo que lleva esos mismos tonos. Estas cosas, queridos lectores, sólo ocurren en el deporte. Velocidad, fuerza, carisma, frialdad, buena táctica y técnica y mentalidad ganadora; estos son los ingredientes necesarios para que las dos grandes citas del deporte este fin de semana se salden con victoria. Buen provecho.