Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Etiquetas | Martes de Arte
Daniel Bolufer

Mosquitos y Tavanos

|

Sigo esperando al delantero italiano procedente del Ascoli que maravilló a Italia la pasada temporada. Cual mosquito en verano llegó sin hacer ruido a la entidad valencianista como tercer delantero y con la intención de aprovechar los minutos que Quique le diera durante la temporada. Una contratación un poco extraña por cómo se llevó a cabo, y por el desconocimiento del cuerpo técnico de las características del jugador. Su puesta a punto sigue siendo todo una incógnita, el jugador dice que está en plenas condiciones para debutar, ya sea Liga, Champions o partidillos en el parque de la esquina. El entrenador duda de su aspecto físico y sigue con un plan especial, que se convertirá en la puesta a punto más larga de la historia. La tensa situación entre el delantero y el técnico, tuvo su punto más caliente cuando el italiano explotó y confirmó que se sentía "marginado" en el Valencia, deporte nacional de los extranjeros rajar cuando uno abandona el equipo y la ciudad que te da de comer.

Lo mejor para el delantero será abandonar el Valencia por la diminuta puerta por la que entró, no sólo por el comportamiento del cuerpo técnico con el jugador, también porque lo tiene bastante difícil para entrar en los planes de Quique. Villa no parece que tenga intención de parar y Morientes se gusta en la mediapunta. Aunque pretender entrar en el once titular con el Valencia ganándolo casi todo, es de locos. La virtud del Valencia no es su equilibrio, es el banquillo repleto de buenos jugadores. El italiano debería pelear con gente como Silva o Angulo para querer entrar en una convocatoria, y viendo el rendimiento del asturiano cada partido y las ganas del canario cuando el entrenador le da minutos, mejor marchar y borrar la mancha del Valencia de su expediente.

El extraño caso Tavano tiene una escapatoria hacia el 'Calcio', concretamente al Inter, equipo que no gana para disgustos y muy lejos de las expectativas creadas a principio de temporada. La escuadra italiana estaría dispuesta a comprar al jugador y dar vida al ataque 'neroazzurro', que con Adriano no gana para disgustos. Ante tal panorama con el italiano como verdadero perjudicado, habría que dar explicaciones a la persona que contrató a un jugador sin ser visto por el entrenador y que nadie conocía cuando aterrizó en Valencia. No es el primer caso que el conjunto che ficha a jugadores sin el consentimiento del que verdaderamente va a utilizarlo durante la temporada. Oliveira, actualmente en el Milan, o Cannobbio, son dos claros ejemplos de la mala coordinación existente entre técnico y el director deportivo, que afecta a demasiados equipos y que resta potencial a muchas plantillas, contratando jugadores de nombre extranjero y de dudosa calidad para competir en nuestra Liga.

Mosquitos y Tavanos

Daniel Bolufer
Daniel Bolufer
miércoles, 4 de octubre de 2006, 00:20 h (CET)
Sigo esperando al delantero italiano procedente del Ascoli que maravilló a Italia la pasada temporada. Cual mosquito en verano llegó sin hacer ruido a la entidad valencianista como tercer delantero y con la intención de aprovechar los minutos que Quique le diera durante la temporada. Una contratación un poco extraña por cómo se llevó a cabo, y por el desconocimiento del cuerpo técnico de las características del jugador. Su puesta a punto sigue siendo todo una incógnita, el jugador dice que está en plenas condiciones para debutar, ya sea Liga, Champions o partidillos en el parque de la esquina. El entrenador duda de su aspecto físico y sigue con un plan especial, que se convertirá en la puesta a punto más larga de la historia. La tensa situación entre el delantero y el técnico, tuvo su punto más caliente cuando el italiano explotó y confirmó que se sentía "marginado" en el Valencia, deporte nacional de los extranjeros rajar cuando uno abandona el equipo y la ciudad que te da de comer.

Lo mejor para el delantero será abandonar el Valencia por la diminuta puerta por la que entró, no sólo por el comportamiento del cuerpo técnico con el jugador, también porque lo tiene bastante difícil para entrar en los planes de Quique. Villa no parece que tenga intención de parar y Morientes se gusta en la mediapunta. Aunque pretender entrar en el once titular con el Valencia ganándolo casi todo, es de locos. La virtud del Valencia no es su equilibrio, es el banquillo repleto de buenos jugadores. El italiano debería pelear con gente como Silva o Angulo para querer entrar en una convocatoria, y viendo el rendimiento del asturiano cada partido y las ganas del canario cuando el entrenador le da minutos, mejor marchar y borrar la mancha del Valencia de su expediente.

El extraño caso Tavano tiene una escapatoria hacia el 'Calcio', concretamente al Inter, equipo que no gana para disgustos y muy lejos de las expectativas creadas a principio de temporada. La escuadra italiana estaría dispuesta a comprar al jugador y dar vida al ataque 'neroazzurro', que con Adriano no gana para disgustos. Ante tal panorama con el italiano como verdadero perjudicado, habría que dar explicaciones a la persona que contrató a un jugador sin ser visto por el entrenador y que nadie conocía cuando aterrizó en Valencia. No es el primer caso que el conjunto che ficha a jugadores sin el consentimiento del que verdaderamente va a utilizarlo durante la temporada. Oliveira, actualmente en el Milan, o Cannobbio, son dos claros ejemplos de la mala coordinación existente entre técnico y el director deportivo, que afecta a demasiados equipos y que resta potencial a muchas plantillas, contratando jugadores de nombre extranjero y de dudosa calidad para competir en nuestra Liga.

Noticias relacionadas

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto