Las clínicas dentales en sus servicios de implantología cuentan con dos tipos de implantes dentales diferentes, según el material: zirconio y titanio

Los implantes dentales en Málaga son piezas artificiales colocadas en el maxilar para crear una base sólida sobre la que se efectúa rehabilitaciones o restauraciones dentales de piezas perdidas. Tras su colocación, los implantes dentales funcionan como si de piezas dentales naturales se tratase, permitiendo al paciente comer y beber con tranquilidad y obteniendo una mejor estética dental.Se habla de una solución permanente en sustitución a las dentaduras postizas, que en la mayoría de las ocasiones crea incomodidad en los pacientes, debido a su movilidad o generación de espacios que permiten la entrada de molestos restos de comida.

Generalmente, una clínica dental en Málaga ofrece a sus pacientes implantes de dos tipos, dependiendo de su material:

Implantes dentales de zirconio
El zirconio es un material cerámico especialmente duro y resistente que es empleado en odontología para la fabricación de brackets, confección de coronas dentales o puentes o para la fabricación muñones para ser empleados tras una endodoncia.

El color del zirconio es blanco, similar al de las piezas dentales originales, ofreciendo una estética extrema.

Un material que evita la formación de placa bacteriana a su alrededor, no provoca problemas con los cambios de temperaturas y resiste muy bien la corrosión de los ácidos.

La biointegración es la técnica empleada a la hora realizar los implantes de zirconio, un unión química a través de una capa creada entre la superficie del implante y la superficie del hueso dental.

Implantes dentales de titanio
Este tipo de implantes en Málaga es el más empleado, ya que se habla de un metal más ligero, de extrema dureza y fácil moldeabilidad.

A través de la osteointegración se lleva a cabo este tipo de implante, una técnica mediante la cual las células de hueso se adhieren a la superficie del implante, consolidándose progresivamente al maxilar.