El Real Madrid tendrá que dejar para el Bernabeu la deseada revancha que pretendía tomarse, y ahora tendrá una nueva afrenta de la que resarcirse. El Olympique de Lyon fue mejor y más que su rival durante toda la primera parte, en la que Junio centralizó el juego galo y Fred y Tiago culminaron los goles. Los de Cappelo mostraron todas sus carencias alrededor de la pelota que nunca supieron manejar hasta que el Lyon bajó el pistón en la segunda parte, a pesar de que aún ni con la iniciativa los blancos inquietaron la portería de Coupet. Los tres puntos quedan de forma más que merecida en Lyon, y el Madrid a reflexionar.

FICHA TÉCNICA 2- Lyon: Coupet (1), Abidal (2), Cris (2), Mueller (1), Reveillere (2); Toulalan (1), Juninho (3), Malouda (2), Tiago (3); Fred (2) y Govou (2). 0- Real Madrid: Casillas (1), Cicinho (1), Cannavaro (0), Sergio Ramos (1), Roberto Carlos (0), Emerson (0), Diarra (0), Beckham (0), Raúl (0), Cassano (1), Van Nistelroy (1). Goles:Fred (min. 11), Tiago (min. 31). Árbitro: Wolfang Stark (Alemania) (1) mostró cartulina amarilla a Sergio Ramos (min. 31), Reveillere (min. 37), R. Carlos (min. 45), y Diarra (min. 90). Incidencias: 50.000 espectadores llenaron el estadio Gerland (Lyon). 25 grados de temperatura al comienzo del encuentro. DATOS DESTACABLES Lo mejor: El tándem Tiago-Juninho Juntos volvieron loco al centro del campo del Madrid. Tiago movió al equipo y consiguió en bonito gol, mientras que Juninho dio una lección de cómo tocar en largo y lanzar libres directos. Lo peor: el juego del Real Madrid Los blancos tienen mucho que mejorar, en la primera parte fueron borrados del campo, y en la segunda fueron inoperantes. El dato: el Olimpique de Lyon no pierde en casa en competición europea desde el 2002, cuando cayó ante el Ajax de Amsterdam.

Luciano Sabatini

El estadio Gerland volvió a vestirse de gala con los colores y motivos de la Champions para recibir al Real Madrid en la primera jornada de clasificación de la liguilla. Ambos equipos tenían sus cuentas pendientes, los galos quieren resarcirse de la eliminación de la Champions a manos del Milan y así demostrar porque llevan dominando el panorama francés las últimas cinco temporadas, mientras que los blancos saltaban al campo con ánimo de revancha tras la humillante derrota que sufrieron el año pasado en este mismo campo por 3-0.

La sensación que había en el aire de igualdad, ya que Capello habría reforzado con sus conceptos al equipo, y que a los conjuntos dirigidos por el italiano era muy difícil hacerles goles, se vería rápidamente desmentida, tan rápido como el balón echara a rodar. El Madrid intentó salir a dominar el partido, presionando con Raúl y Cassano de forma activa, pero los galos se deshacían rápido del empuje madridista con el buen hacer y el toque de Toulalan, Tiago y Jouninho. Houllier había tendido una red de conexiones en el medio, en la que Emerson y Diarra se verían continuamente superados.

Si el año pasado el Lyon tardó 28 minutos en marcar, esta vez no esperaría tanto ante la pasividad de la zaga blanca. Tan solo hizo falta un balón largo para desarmar a los cuatro hombres de atrás que no achicaron en el fondo con la sufieciente rapidez y dejaron a Fred en línea, que sacó varios metros en la arrancada a Cannavaro y batió por bajo a Casillas. Hasta ese momento en el minuto 11 de partido, el Madrid había conseguido disimular la superioridad en el juego de los galos con balones largos y con la lucha y brega de Cassano y Van Nistelroy, argumentos que quedaron a partir de entonces en evidencia con el Lyon por delante en el marcador y el Madrid con la responsabilidad de mover ficha.

Baño al Madrid
Con pocas armas para la reacción el Madrid no lograría acercarse y reaccionar al gol de su rival. Emerson estaba muy errático en el pase, así como Diarra, superados continuamente en el doble pivote por Tiago y Toulalan. Nadie era capaz de coger la marca de junio, y Diarra tenía que parar siempre en infracción a su ex compañero, con el peligro que las faltas a balón parado tienen si salen de las botas del brasileño. Govou gozaría de una buena ocasión que lanzaría rozando el palo en un balón que perdió en la frontal Diarra, para desesperación de su técnico, que si lo pone ahí es justamente para que no pierda esos balones. Era el preludio del segundo gol en plena avalancha gala; Abidal ofrecía un pase a la frontal en una de sus incansables incursiones por la banda y Govou se recreaba en el amague pasando finalmente el balón por encima de Roberto carlos para que Tiago remachara una espléndida jugada. 2-0 y corrían los fantasmas de la temporada pasada por la cabeza de los madridistas.

La pesadilla para el Madrid continuaría, pues ni Emerson ni Diarra eran capaces de hacese con el control del juego, seguramente porque sencillamente no están capacitados para ello, mientras que Raúl y Cassano solo podían correr detrás de la pelota. La mala imagen que estaban dando los blancos acabaría por confirmarse el aluvión de ocasiones que tendrían los galos: Fred reamataba flojo tras recoger un rechace de Casillas ante un centro de Junio; minutos después sería Reveillere recibiría un balón de Fred en área pequeña pero éste no supo rematar cuando tenía toda la portería para marcar y Casillas pudo atrapar el balón; el Lyon no se conformaba con la ventaja, y Malouda volvería a intentarlo tras un precioso recorte de Fred, pero su tiro se estrellaría en el larguero. Por esos momentos el baño al que estaba siendo sometido el Madrid era escandaloso. Para cerrar el conjunto de despropósitos de los blancos, Cannavaro, que hoy cumplía 33 años y tuvo su peor noche como madridista, fallaba en un fácil despeje al que Casillas tampoco acertaba a despejar encontrándose Fred con un remate fácil de cabeza que envío alto. Con esta ocasión se cerraba la primera parte, en la que el Lyon marcó dos goles, y bien pudieron haber sido cinco.

Segunda parte, el Lyon cede en su dominio

La reprimenda de Capello en los vestuarios debió ser para recordar, pues con más corazón que cabeza el Madrid tras el descanso salió a presionar arriba. Los pupilos de Houllier, debieron haberse visto tan superiores en los primeros 45 minutos que aceptaron de buena forma el envite blanco. Alex y Mueller echaron la línea defensiva diez metros más atrás y los centrocampistas recularon para controlar la pelota sin demasiados riesgos. Solo así el Madrid fue capaz de recuperar en cierta manera la pelota, y saber qué forma tenía por primera vez en el partido. Rayes, que había entrado por Cassano en su debut en Champions con el Madrid, se pegó a la banda izquierda, pero no encontraba huecos ante Reveillere. Minutos después serían Robinho y Guti quienes tomarían la alternativa sustituyendo al capitán Raúl y a un desdibujado Beckham, que luchó como siempre, aunque con desacierto. Así Reyes iría a la derecha y Robinho se movería por el sector izquierdo, dejando a Guti sobre la media punta. No se entiende porque Capello recurre a las bandas solo cuando se ve en aprietos.

Si no era mediante el juego entrelazado del Lyon, sería con las faltas de media distancia como crearía peligro el equipo francés, pues cuenta en sus filas con el mejor lanzador del mundo, junio Pernambucano. Hubo “friquis” para todos los gustos: desde la derecha por fuera de la barrera, desde la izquierda con mucha rosca, toda una lección de cómo se tira una falta, para poco después, tras haber sentado cátedra dejar el campo entre los aplausos de su público. El Madrid seguía perdiendo y aunque había recuperado la pelota no tenía demasiados minutos por delante para la remontada, que tras ver la primera parte hubiera sido una heroicidad.

Una de las pocas ocasiones la protagonizó Van Nistelroy, como siempre, tras el saque de una falta desde el costado derecho, pero el holandés se estorbó en el salto con Sergio Ramos y el balón se fue alto. El ariete tuvo la posibilidad de resarcirse de la jugada pocos minutos después cuando recogió un balón de Reyes en profundidad pero lo estrelló en el lateral de la red cuando se paró solo ante Coupet. Luego, dominio y garra, pero no llegarían más ocasiones claras.

El partido estaba decidido, y los blancos expuestos a que en una contra quedaran más en evidencia, con lo que los clásicos minutos de la basura en vez de ser 2 ó 3 fueron 10 ó 15. El Lyon se permitió el lujo de reservar fuerzas y contemporizar el juego, ya que ni Guti, muy activo desde que entrara en el campo, ni Reyes conseguían llegar al área con claridad.

2-0 y gracias. El Lyon queda segundo de grupo, por detrás del Steaua de Bucarest que venció por 1-4 al Dimano de Kiev a domicilio, mientras que el Madrid tendrá que esperar al partido ante el Dinamo la próxima jornada para intentar sumar sus primeros puntos de la liguilla.