Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Etiquetas | Desde la S
Alfonso Sotelo

Las comparaciones, como siempre, odiosas

|

Se han lanzado en las últimas fechas lamentables comentarios sobre los éxitos de la selección de baloncesto y los fracasos, repetitivos ya, de la de fútbol. Huelga felicitar a los baloncestistas, que han sido felicitados y homenajeados hasta por el Comité Social de Plutón, cuando era planeta. Que ahora ya no pueden tener comités ni homenajear a nadie, que no son planeta, chincha rabiña. Los de Pepu hicieron un gran Mundial. Arrasaron a todos los que tuvieron la osadía de plantarle cara en el calentamiento, cuando se lanza a canasta sin temor y sin pudor. Luego se acobardaban durante el partido, porque Gasol, Calderón, Navarro y cía. imponen. Vaya que sí imponen…

Pero claro, aquí siempre hay que buscar la comparación y la puesta en cuarentena de los éxitos. Mientras miles de personas aclamaban a los héroes nipones en Plaza Castilla, otros tantos ya imaginaban lo felices que serían si el combinado de fútbol caía en Irlanda del Norte en una Belfast en paz para comparar, cuestionar y vilipendiar. Una Belfast en paz hasta que terminó el partido. Porque Luis fue fusilado a preguntas cuestionando su continuidad nada más acabar el choque.

Uno, que aún no peina canas (afortunadamente) pero que lleva viendo a la absoluta unos años, no puede presumir ni de nacionalista español, ni de patriota, ni de héroe. Pero sí de honesto. He dicho cientos de veces, en rincones como éste, que me interesa la selección española lo mismo que la de Burundi cuando juega un partido de rugby frente a la de Mozambique. Es decir, nada, rien de rien, cero patatero, que diría el “gran” presidente que tenemos. Pero, bendita la hora, vivo en este país. O en lo que queda de él. Y por eso me afecta todo lo que en él ocurre. He visto morir al gran Miguel Muñoz, destituir a Luis Suárez después de Italia 90, aclamar a Clemente cuando le ganaba 0-3 a la propia Irlanda del Norte, echarlo cuando perdió en Chipre 3-2, homenajear al “salvador” Camacho, que dio su enésima espantada, poner al de la gorra (que corra) Sáez y volverlo a echar, gorra incluida… Uno ha visto tantas cosas que no se cree ya nada en lo que respecta a esta Federación de amigueo y compadreo.

Cierto es que el mono-sabio de Hortaleza tenía que haberse ido tras el pasado Mundial. Pero no lo hizo y nadie dijo nada. Además, si en este país no dimite nadie (presidentes y ministros los primeros), ¿por qué tiene que hacerlo Luis? No niego que lleva a sus amigotes, que se llevará algunas comisiones, que es defendido por el brillante (¿?) presidente de la RFEF, pero eso ya lo sabíamos cuando arribó en la selección absoluta. Que siga yendo Raúl, Torres y algunos elementos más es tan triste como cuando fichó a Solozábal, Otero y Andrei para el Betis, a Pedro, Estebaranz y Juanito para el Sevilla, o rechazó a Makaay por contratar a Oli para el Betis, cuyo representante era amigote suyo. Si nos ponemos a comparar a Pepu con Luis, vamos a comparar al Luis de hace dos meses con el de ahora. Porque parecía que iba a ganar el Mundial y que iba a ser más o menos como el Cid y ahora ha perdido un partido (otro más, pero un partido al fin y al cabo) y es visto casi como Abderramán III.

Yo, insisto, paso de las selecciones de España. Cambio de canal cuando juega y prefiero leer a Umbral que ver a Raúl como un capullo mirando el cielo cuando suena el himno. O a Sergio Ramos, que ya imita a Raúl hasta en eso. Pero ya es hora de que seamos algo sensatos. Guti decía que si Gasol y Calderón eran tan buenos, que jugaran el próximo Mundial de fútbol. Guti, bonito, péinate bien y responde… ¿serías tú capaz de encestar un tiro libre? No seamos más idiotas, por favor, que para eso ya tenemos presidente. Por cierto, Andalucía, ¿cuándo juega?

Las comparaciones, como siempre, odiosas

Alfonso Sotelo
Alfonso Sotelo
sábado, 9 de septiembre de 2006, 20:31 h (CET)
Se han lanzado en las últimas fechas lamentables comentarios sobre los éxitos de la selección de baloncesto y los fracasos, repetitivos ya, de la de fútbol. Huelga felicitar a los baloncestistas, que han sido felicitados y homenajeados hasta por el Comité Social de Plutón, cuando era planeta. Que ahora ya no pueden tener comités ni homenajear a nadie, que no son planeta, chincha rabiña. Los de Pepu hicieron un gran Mundial. Arrasaron a todos los que tuvieron la osadía de plantarle cara en el calentamiento, cuando se lanza a canasta sin temor y sin pudor. Luego se acobardaban durante el partido, porque Gasol, Calderón, Navarro y cía. imponen. Vaya que sí imponen…

Pero claro, aquí siempre hay que buscar la comparación y la puesta en cuarentena de los éxitos. Mientras miles de personas aclamaban a los héroes nipones en Plaza Castilla, otros tantos ya imaginaban lo felices que serían si el combinado de fútbol caía en Irlanda del Norte en una Belfast en paz para comparar, cuestionar y vilipendiar. Una Belfast en paz hasta que terminó el partido. Porque Luis fue fusilado a preguntas cuestionando su continuidad nada más acabar el choque.

Uno, que aún no peina canas (afortunadamente) pero que lleva viendo a la absoluta unos años, no puede presumir ni de nacionalista español, ni de patriota, ni de héroe. Pero sí de honesto. He dicho cientos de veces, en rincones como éste, que me interesa la selección española lo mismo que la de Burundi cuando juega un partido de rugby frente a la de Mozambique. Es decir, nada, rien de rien, cero patatero, que diría el “gran” presidente que tenemos. Pero, bendita la hora, vivo en este país. O en lo que queda de él. Y por eso me afecta todo lo que en él ocurre. He visto morir al gran Miguel Muñoz, destituir a Luis Suárez después de Italia 90, aclamar a Clemente cuando le ganaba 0-3 a la propia Irlanda del Norte, echarlo cuando perdió en Chipre 3-2, homenajear al “salvador” Camacho, que dio su enésima espantada, poner al de la gorra (que corra) Sáez y volverlo a echar, gorra incluida… Uno ha visto tantas cosas que no se cree ya nada en lo que respecta a esta Federación de amigueo y compadreo.

Cierto es que el mono-sabio de Hortaleza tenía que haberse ido tras el pasado Mundial. Pero no lo hizo y nadie dijo nada. Además, si en este país no dimite nadie (presidentes y ministros los primeros), ¿por qué tiene que hacerlo Luis? No niego que lleva a sus amigotes, que se llevará algunas comisiones, que es defendido por el brillante (¿?) presidente de la RFEF, pero eso ya lo sabíamos cuando arribó en la selección absoluta. Que siga yendo Raúl, Torres y algunos elementos más es tan triste como cuando fichó a Solozábal, Otero y Andrei para el Betis, a Pedro, Estebaranz y Juanito para el Sevilla, o rechazó a Makaay por contratar a Oli para el Betis, cuyo representante era amigote suyo. Si nos ponemos a comparar a Pepu con Luis, vamos a comparar al Luis de hace dos meses con el de ahora. Porque parecía que iba a ganar el Mundial y que iba a ser más o menos como el Cid y ahora ha perdido un partido (otro más, pero un partido al fin y al cabo) y es visto casi como Abderramán III.

Yo, insisto, paso de las selecciones de España. Cambio de canal cuando juega y prefiero leer a Umbral que ver a Raúl como un capullo mirando el cielo cuando suena el himno. O a Sergio Ramos, que ya imita a Raúl hasta en eso. Pero ya es hora de que seamos algo sensatos. Guti decía que si Gasol y Calderón eran tan buenos, que jugaran el próximo Mundial de fútbol. Guti, bonito, péinate bien y responde… ¿serías tú capaz de encestar un tiro libre? No seamos más idiotas, por favor, que para eso ya tenemos presidente. Por cierto, Andalucía, ¿cuándo juega?

Noticias relacionadas

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto