Hoy ha sido día de sorteo de Champions League y Copa de la UEFA. Estaban en el bombo el Valencia y el Osasuna, y debía haber estado el Villarreal de no mediar el accidente de las dos últimas semanas frente a los eslovenos del Maribor.

Por parte valencianista, euforia absoluta. Rival sencillo a priori (será el vencedor de la eliminatoria entre el Zurich suizo y el Salzburgo austriaco) y partido de vuelta en Mestalla. Poco más se le puede pedir a un sorteo de estas características.

Osasuna tampoco puede quejarse. Aun cuando su oponente, el Hamburgo, es un enemigo de cuidado, el hecho de que el partido de vuelta se dispute en el Reyno de Navarra y, sobre todo, la entidad del resto de integrantes del bombo (Milan, Arsenal, Liverpool,...) da motivos para un cierto optimismo de cara a esta eliminatoria.

El resto del sorteo no ha deparado grandes enfrentamientos. En principio, los cabezas de serie deben seguir adelante sin mayores problemas, si bien hay eliminatorias a priori igualadas, como pueden ser el Austria de Viena-Benfica o el Standard de Lieja-Steaua de Bucarest.

Como es sabido, los perdedores de esta eliminatoria pasarán a disputar la tercera ronda previa de la Copa de la UEFA, esto es, la anterior a la fase de grupos. Confiemos en que sólo haya tres equipos españoles (Celta, Sevilla y Espanyol) en ese bombo. Eso querrá decir que en el bombo "gordo" habrá cuatro, que es lo que nuestro fútbol merece. Que por algo la Supercopa de Europa la juegan dos equipos españoles.