El FC Barcelona Regal ha cerrado de la mejor manera posible su participación en el 'Top 16' de la Euroliga con un triunfo de prestigio contra Maccabi Electra de Tel Aviv en un duelo sin nada en juego y en el que tuvieron que trabajar para superar a unos hebreos que sí tenían que ganar para ser segundos, y en un partido que Abrines aprovechó para exhibirse y cerrar una fiesta que empezó con el homenaje a los blaugranas que conquistaron en 2003 la primera Euroliga de la entidad.

El partido no se decidió hasta los segundos finales del último cuarto, cuando el Barça Regal consiguió defender una pequeña renta conseguida en los minutos decisivos gracias a un Abrines finísimo desde el triple y la línea de tiros libres, para firmar 21 puntos que son su máximo histórico en Euroliga.

Sin Navarro en los minutos finales, tocado, el mallorquín fue la estrella que cerró la fiesta, ayudado por la veteranía de un Sarunas Jasikevicius --provocó falta para evitar un triple que empataba el duelo y no falló los tiros libres decisivios-- que fue protagonista del homenaje al ser uno de los referentes de aquel gran equipo del 2003.

Eso sí, pese a las ganas de acabar el 'Top 16' con victoria, el hecho de no jugarse nada y de tener bajas importantes pesó en el juego de los blaugranas al principio, sumado a que Maccabi Electra no tenía más opción que ir a por todas y vencer para ser segundos y asegurarse el factor pista a favor en el 'play-off'. Ello, sumado al cálido homenaje previo, hizo de este un partido atípico.

Obviamente salió más fuerte Maccabi, intentando coger rentas rápido y sorprender a un Barça Regal que, no obstante, se picó y empezó a marcar territorio. Fue una primera parte bastante igualada pese al 2-8 inicial, con un marcador bajo fruto de errores en ambos lados pero con canastas de lujo para el bien de un Palau Blaugrana que presentó muy buen aspecto.

Además, el duelo sirvió para ver a Abrines en acción más allá de minutos de premio, pues con la ausencia de Mickeal y Rabaseda se repartió los minutos de ala con Joe Ingles. El mallorquín respondió con triples, mates y acciones que hicieron levantarse de sus asientos a la afición, cerrando con nota un partido que para los blaugranas era esto, una prueba de fuego de cara al 'play-off' que empieza el próximo martes.

Pero el partido no era amistoso, y poco tuvo de ello. El Maccabi endureció su juego en la segunda parte al verse abajo y, coincidiendo con un estricto arbitraje protestado por los blaugranas, consiguieron un muy buen parcial en el tercer cuarto (15-24) que les hizo encarar el último y definitivo en una situación que habrían firmado antes de empezar el duelo, cinco puntos arriba y buenas sensaciones.

Una vez pasó el intenso tercer cuarto, se vivió un partido nuevo como acostumbra a pasar en duelos tan igualados. Jawai y Abrines, con cinco puntos consecutivos, fueron los protagonistas en su inicio para poner al Barça de nuevo arriba (58-57, a falta de 6 minutos) mientras el capitán Juan Carlos Navarro cojeaba por el fondo de pista tocado por una acción fortuita, pero atento para celebrar otro triple de un crecido Abrines que abría brecha a favor local.

Con un Maccabi intenso, que para nada quería arriesgarse a perder posiciones en este grupo F considerado el de la muerte, fue muy difícil conseguir una renta suficiente para administrarla, y es que Logan y Smith por fuera y James por dentro hicieron mucho daño y fueron un peligro constante para los de Xavi Pascual.

Al final, la perseverancia blaugrana sirvió para hacer bueno el trabajo previo y cerrar con la mejor sensación posible un 'Top 16' casi inmaculado, con una única derrota en contra en la sufrida en la pista del Khimki Moscú, y en la que los catalanes han demostrado ir de menos a más y tener confianza, escudados en su gran defensa, para superar contratiempos e infortunios cuando llega el momento clave.