Hace unas horas caía, como una losa, en la Casa Real española la imputación de la Infanta Cristina por “cooperación necesaria” en el presunto tráfico de influencias en el caso Nóos. El juez, acordándose de la frase del Rey, “todos somos iguales ante la ley”, llama a declarar a la hija de Juan Carlos el próximo día 27 de abril.

Como todo el mundo dice, y yo no voy a ser menos, una persona imputada no es una persona culpable, sólo quiere decir que tiene que ir a declarar ante un juez, en este caso el juez Castro que es quién se ocupa de la instrucción del caso en el que Urdangarín es uno de los principales imputados, al haber visto su señoría indicios claros de que la Infanta pudiera haber infringido la ley.

Por lo tanto no vamos a hacer ahora un juicio público, algo que sí, a mi entender, hace mucho tiempo se viene haciendo con el marido de la Infanta, Iñaki Urdangarín. Para empezar fue la Casa Real quien mediante un comunicado hizo saber que Iñaki no actuaba como debía ser, y por este echo se le quitó de la web de la Institución.

Solo imputada
Al margen del revuelo mediático que la noticia ha producido hasta el momento de escribir estas líneas Iñaki, al igual que la Infanta, sólo están imputados, con indicios claros de haber infringido la ley, pero, finalmente, será la justicia con la oportuna sentencia quien tendrá la última la última palabra.

Por lo que parece en este país no todos los imputados son tratados de la misma manera, depende del origen, la mujer del socio de Urdangarin lleva más de un año imputada y parece ser que sus funciones en el entramado empresarial investigado eran las mismas que las de la Infanta Cristina de Borbón. Mucho ha tenido que valorar las pruebas en su poder el juez Castro para atreverse a dar el paso de llamar como imputada a una persona que ocupa un lugar, aunque no de privilegio, en la línea dinástica.

La Fiscalía contra el Juez

A las pocas horas de conocerse la imputación de la Infanta la Fiscalía Anticorrupción ha dado a conocer que tiene previsto presentar un recurso ante la Audiencia de Palma contra dicha imputación. En medios jurídicos y periodísticos ha extrañado tal decisión ya que la función del fiscal es defender los intereses de los ciudadanos ante la justicia. Pero la Fiscalía es un organismo piramidal y jerárquico, es decir los fiscales tienen la obligación de acatar las órdenes del Fiscal General del Estado y éste es nombrado por el Gobierno, por tanto ya sabemos que al Partido Popular no le ha hecho ninguna gracia que se impute a un miembro de la Familia Real. Ahora la pelota está en el tejado de la Audiencia y si ésta desautoriza al juez Castro los españoles tendrán muchos motivos para recelar de la justicia y pensar que no es igual para todos, lo diga Agamenón o su porquero.

Es evidente que durante estos días vamos a leer y escuchar muchas diatribas contra el juez que se ha atrevido a cumplir con lo que dicen las leyes y a llevar hasta extremos insospechados el dicho de que “la justicia es ciega y es igual para todos”, los periodistas áulicos y cortesanos van a atacarle creyendo que así hacen un favor a la Casa Real, pero se equivocan, el pueblo ya no es tonto y si a la Infanta se le levanta la imputación sin pasar antes por el interrogatorio del juez Castro son muchos los españoles que van a creer que la mano que mece la cuna ha tomado cartas en el asunto.

Crisis en la Institución
La imputación de Cristina llega en un momento de plena crisis en la institución monárquica, el Rey está recuperándose de una delicada intervención, recuperación lenta, mientras los mediadores de la Casa intentan subsanar la mala imagen real de todos los miembros de esta familia, o casi todos, obteniendo nulos resultados.

La herencia del Rey, sin comentarios
El Domingo de Resurrección nos levantábamos con la información del diario El Mundo donde se daba cuenta detallada y contrastada del testamento de Don Juan, padre del Rey, una herencia importante y nos causaba sorpresa en tanto en cuanto toda la vida los monárquicos de pro y la misma Casa Real nos habían explicado que Don Juan y su familia las habían pasado canutas.

Más de mil millones de pesetas en Suiza
El padre del Rey llegó a tener en una cuenta en Suiza más de mil millones de pesetas. Teniendo en cuenta que Don Juan y su familia vivieron en el exilio y que éste murió en 1993 tal cantidad de dinero no era una minucia.

En su testamento le dejó al Rey, en esa cuenta suiza, 375 millones de pesetas, unos dos millones y medio de euros. Una cifra nada desdeñable para una familia que nos habían explicado habían pasado penurias durante el exilio, hoy ya podemos suscribir que dorado.

La cuenta suiza del Rey, sin respuestas oficiales

Obviamente nos estamos preguntando si el Rey, ha tenido 20 años para hacerlo, ha traspasado el importe heredado a una cuenta española o bien la ha declarado a la Hacienda española.

Después de cuatro días desde que saltó la noticia la Casa Real todavía no ha dado ningún comunicado al respecto, dicen estar estudiando que sucedió en su día con aquellas cantidades ya que en principio y al abrir el testamento los albaceas aconsejaron dejar el dinero en Suiza por una “cuestión de imagen”.

Nadie calla
Quizá creen que las prebendas que durante tantos años han disfrutado hoy siguen estando intactas, pues no, lo aseguro, la gente ya no se calla, las informaciones, contrastadas, están ahí y los miembros de la Casa Real pueden callar o hablar, en función de una postura u otra los españoles tomarán conciencia y verán al Jefe del Estado según la forma de actuar del mismo.

Don Juan también dejó en su testamento millones de pesetas a sus hijas, doña Pilar y doña Margarita, la primera desvió lo que su padre le dejó a una cuenta de la banca J.P. Morgan de Nueva York.

Una imagen deplorable para una española de pro, hermana del Rey de quién tantas veces se dijo que su vida cotidiana era la de apretarse el cinturón.

Por supuesto aún colea y ahí está la presencia de Corinna en la vida del Rey y la del Gobierno español y la de los ciudadanos. Nadie explica nada. Nadie da la cara.

Corinna paga a Urdangarin 50.000 euros
El Gobierno español niega a Corinna, en todo, cuando ella aparece también en mails como benefactora de Iñaki Urdangarín habiéndole pagado por su trabajo en Laureus 50.000 euros.

Corinna, que no vive en España, está constantemente presente en esa vida real, como una persona que cobraba, aunque ella lo niegue, una supuesta comisionista de altos vuelos y conseguidora de grandes empresas y empresarios, una cortesana moderna que bien pudiera haberse paseado en el siglo XVII por los canales venecianos siendo apreciados sus encantos por la mayoría de los aristócratas.

La princesa alemana se fue, un halo de misterio la envuelve y parece que sus secretos están guardados por un Gobierno que no habla y por un Rey que se recupera y tampoco habla, está ausente de todo y para todos, ni un comunicado. Nada. Desparecido en su restablecimiento.

Las salidas nocturnas de Letizia

A todo eso debemos añadir las supuestas salidas nocturnas de Letizia con sus amigas y sin el Príncipe aumentando, día a día, los rumores de un amor resquebrajado por circunstancias difíciles de saber o porque el amor, con los años, se torna en algo distendido en donde sus protagonistas conectan con aquellas personas que formaban parte del círculo habitual de cuando aún eran solteras.

Las parejas, o eso parece que sucede en Letizia y el Príncipe, hay que airearlas para poder seguir el ritmo de la convivencia.

Juancarlistas, no Felipistas
Ni Letizia ni el Príncipe llegan en su plenitud a la gente del pueblo. Digamos que los monárquicos españoles son capaces de perdonarle muchos tropiezos al Rey pero no han hecho ningún esfuerzo para trasladar su Juancarlismo al Felipismo.

Media un abismo y los hay que hablan de que el Rey abdique, con rapidez, lo hacen con urgencia, con mano fuerte, dura, impasible.

Juan Carlos jamás fue escogido por los españoles
Se olvidan, sin duda, de que aunque Felipe sea el sucesor de Juan Carlos, las cosas no pueden llegar en un plis plas, ¿por qué?, fácil, el Rey Juan Carlos jamás fue escogido por los españoles, lo metieron de rondón cuando se votó la Constitución después de ser impuesto por la mano de un dictador con las manos manchadas de sangre.

Juan Carlos, durante muchos años, se ha hecho con la simpatía de los españoles pero eso, a mi modo de ver, no es suficiente para que su hijo herede un trono sin que la ciudadanía opine.

Elena divorciada
La Casa Real española hoy es como el Titanic, un barco que se hunde. Nadie puede tomar el timón. El Rey está enfermo, la Reina, como siempre, ocupa un discreto segundo lugar “como profesional”, la Infanta Elena está al lado de su hermana escuchando sus penas, además recordemos que Elena eligió divorciarse pues su matrimonio era un calvario.

El Gobierno no habla, o dice muchas tonterías que no agradan a los ciudadanos.

España zozobra
España zozobra, la gente no tiene trabajo, la gente está metida en un túnel negro donde no ve salida, los servicios sociales no existen y si existen, nadie lo nota, los economistas pintan los temas de trabajo, de supervivencia, como un maná que no llega, al menos hasta dentro de tres años, dicen algunos y los más optimistas lo sitúan a finales del próximo.

Un Gobierno increíble
El Gobierno español dice que hay indicios de que la crisis y sus consecuencias, en estos días, se ve que amaina, mienten, lo hacen siempre, ¿qué se puede esperar de un Gobierno en el que su Presidente da las ruedas de prensa a través de un plasma y nadie puede preguntar?, un desastre.

A los españoles, cada día menos creyentes en los políticos y de lo que dicen, les quedaba, quizá, una pequeña esperanza en la Monarquía aunque sólo fuera para verlos en fotografía. Ahora ni eso.

Es posible que Cristina vaya a declarar en coche y se evite el paseo turístico palmesano, cuesta abajo o arriba, según, que lleva a los Juzgados de Palma de Mallorca, también puede acogerse a declarar por escrito, la ley la apoya.

Y claro, cuando hoy hemos visto la portada del Hola nos hemos echado las manos a la cabeza, la hija mayor de los Príncipes de Asturias, Leonor, ocupa, además de la portada, páginas en el interior donde todo es bonito.

Usan el “todo vale”, inconcebible
Pero, claro, que nadie olvide, por mucho que la Monarquía se esfuerce en vendernos la imagen de una niña para poder “reinstaurar” la buena imagen que tenía esta familia que lo hacen utilizando la imagen de una niña a las que, según sus padres, querían preservar del mundillo mediático. Ahora, visto todo el lodazal que les acompaña, todo vale, o eso creen.

Los miembros de la Casa Real española necesitan un buen gabinete de imagen y que esperen años para recuperar lo que han perdido en tan poco tiempo.

Nadie les cree por muchos juegos malabares que hagan con los menores, peor, si antes no se sabía nada de las hijas de Felipe y Letizia, ¿por qué ahora?.

La presentan como una niña perfecta y no existe nadie perfecto, ya lo vemos en todos ellos, hagan un repaso y verán que aún me dejo muchos cabos sueltos en este camino.