El Unicaja de Málaga se acerca a la final tras ganar al DKV Joventut en un partido que tuvo la mayoría del tiempo controlado. Risacher, con 18 puntos, cuajó un gran partido y se fue ovacinado por el público malagueño.

Antonio Miguel García / Enviado especial al pabellon Martín Carpena

El Unicaja de Málaga nos ha desmontado el chiringuito… y es que la enorme superioridad plasmada en la pista ante el DKV Joventut ha roto con todos los cálculos que presagiaban una eliminatoria igualada y larga. Los de Scariolo están en un momento dulce y, apoyados por su público, se han asegurado por lo menos forzar el quinto partido y la posibilidad de remachar la eliminatoria en Badalona. La clave de la victoria de hoy se ha encontrado en la defensa malacitana que ha secado a las estrellas verdinegras y los ha dejado en unos ridículos 61 puntos.

El Martín Carpena se está acostumbrando a que su equipo le de alegráas y, junto con ellos, están recorriendo un camino que todos esperan que desemboque en el título de Liga.

Pero no todo fue tan fácil como parece, el DKV salió muy concentrado a la pista con la clara consgnia de poner en apuros a los malacitanos. Marcus Brown y Jorge Garbajosa llevaban el peso anotador del equipo y entre los dos suplían la ausencia de Daniel Santiago que tuvo que retirarse al realizar dos faltas seguidas. Los árbitros, con Mitjana a la cabeza, no andaban muy finos y sancionaron a Mumbru con una falta antideportiva en una jugada que no se merecía tal finalización. La “peña” se puso, por primera y última vez, por delante en el marcador en lo que llevamos de eliminatoria al final del primer cuarto (22-23).

El comienzo del segundo cuarto tuvo un nombre propio: Jorge Garbajosa. El pívot madrileño enlazó una serie de acciones positivas para su equipo en dos minutos que estableció una ventaja por encima de los 10 puntos. Dos tapones, dos rebotes, un robo, una asistencia y dos triples, todo él solito, propició que el público se levantará de sus asientos y clamaran al cielo con sus brazos lo bueno que es el 15 del Unicaja. Cuando la NBA se fija en jugadores es por algo, y hoy el jugador malacitano ha demostrado que es uno de los mejores, sino el mejor, ala-pivots del viejo continente.

La gran defensa sobre Rudy, que se fue sin meter un sólo punto al descanso, y Bennett llevó a que el DKV no supiera como contrarrestar el ataque malagueño. Huertas y Mumbru fueron los mejores de su equipo y, gracias a su actuación, hicieron que la ventaja no creciese demasiado para el descanso (40-32).

Con todo lo bonito y espectacular que fue la primera mitad, el tercer cuarto fue algo menos que patético, penoso.. por lo menos en ataque. Y es que en los primeros cinco minutos del cuarto, ambos equipos sólo habían anotado 2 puntos cada uno.

Daniel Santiago realizó su cuarta falta personal y entre Pietrus y Nicevic cubrieron bien la ausencia del pívot puertorriqueño que, en los pocos minutos que estuvo en cancha, no le dio tiempo a hacer mucho más. Bennett seguía perdido en la pista gracias a la gran defensa de Cabezas y Sánchez, tendría que salir Huertas para intentar mejorar el juego del equipo. Al final los dos equipos se entonaron y maquillaron el pésimo cuarto para establecer un marcador de 53-44 para llegar al último cuarto.

El cuarto y último cuarto fue un paseo para el deleite de los más de 10.000 espectadores que llenaron el Martín Carpena. Stephan Risacher volvió a tener minutos y sacó a la luz su enorme clase y calidad, con sus grandes penetraciones y su efectividad desde la línea de 3. El quinteto suplente del Unicaja aumentó incluso la ventaja en el marcador y demostró que lo que hace grande al equipo es el conjunto en sí (76-61).

La eliminatoria se va a Badalona con un 2-0 a favor del Unicaja que puede sentenciar allí su pase a la gran final de la ACB. El DKV Joventut no bajará los brazos y con la ayuda de su público intentará, cuanto menos, ponerle las cosas complicadas al equipo malacitano.

El viernes de la semana próxima será el tercer, y posiblemente el último, partido de la eliminatoria que será televisado en directo por TVE 2.

El Bueno: Jorge Garbajosa que ha hecho de todo y ha roto casi él sólo el partido (18 puntos, 4 rebotes, 4 tapones y 20 de valoración).

El Malo: Rudy Fernández que con 2 puntos no estuvo nunca metido en el partido, siempre muy bien defendido (0 de valoración).

El Feo: Elmer Bennett que está cuajando una decepcionante eliminatoria de semifinales.

El Dato: Más de 10.000 espectadores en el Martín Carpena que animaron sin descanso sin equipo durante todo el partido.

76 - Unicaja Málaga (22+18+13+23): Sánchez (0), Brown, (9), Herrmann (1), Garbajosa (18), Santiago (0) -cinco inicial-. Rodríguez (11), Risacher (18), Lázaro (0), Nicevic (6), Cabezas (9), Pietrus (4).
61 - DKV Joventut (23+9+12+17): Bennett (4), Fernández (2), Mumbrú (13), Barton (12), Archibald (4) -cinco inicial-, Huertas (11), Vázquez (6), Holcolmb (5), Betts (4).

Árbitros: Mitjana, García Ortiz y García González. Eliminaron por cinco faltas personales a Santiago (m.37). MAL

COMENTARIOS
Sergio Scariolo: “estamos donde queriamos estar, con un 2-0 importante pero no definitivo. La clave ha sido la consistencia defensiva que depende del esfuerzo de los jugadores y la concentración para llevar el partido. Ofensivamente hemos estado un tanto irregulares … pero en esos minutos malos hemos hecho una gran defensa que no nos ha sacado del partido”. Resalta el partido de Stephan Risacher y la mejora del rebote defensivo para ganar el siguiente partido.

Aíto García Reneses: “hemos empezado el partido mucho mejor que el otro día en cuanto a mentalidad y hemos igualado marcador. Garbajosa nos ha matado en dos minutos y se han marchado en el marcador y hemos ido a remolque pese a que Santiago no ha destacado en ataque. Nuestros malos porcentajes han sido la clave del desarrollo del encuentro”. En definitiva, para él el Unicaja ha ganado con justicia aunque cree que con un 2-0 siempre es posible remontarlo pero es muy difícil si su equipo baja los brazos es como hoy. “La superioridad es evidente y hay que aceptarlo y felicitar al rival”.