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Adrián Candal

Tras el plácet y los despropósitos

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Después de casi una semana de agonía con el asunto de la lesión de Asier del Horno, que para algunos encierra algún misterio, la Selección Española ha llamado a su sustituto. Mariano Pernía será quién ocupe la plaza de lateral zurdo. El hispano-argentino es un hombre polivalente, con mucha llegada, y que en el Getafe mostró sus fenomenales virtudes.

Sin embargo, Luís Aragonés ha llevado el tema del recambio con extremo secretismo. Un secretismo que ha generado más de un problema, y demasiadas especulaciones. No obstante, el nombre del sustituto ya lo conocía la prensa desde el sábado. Hay cosas que no se entienden. A todas luces fue una decisión que solamente ha causado problemas.

Las complicaciones que el ocultismo de Aragonés han producido son considerables. En Galiza se califica de ‘cacicada y vergüenza nacional’ (Diario Depor Sport) la decisión del entrenador nacional de no llamar a Capdevila. ‘La prensa de Madrid tira más que dos tetas y dos carretas juntas’, comentan en otro medio coruñés. En la prensa gallega se recuerda que el seleccionador dijo no hace demasiado que para ir al mundial habría que tener cierta experiencia en las convocatorias. Esto es, ya haber sido llamado anteriormente para jugar con ‘la furia’. Realmente, eso no se da, ya que el argentino nunca había sido llamado.

Pero no solo desde tierras gallegas se recrimina la postura del seleccionador. En Sevilla, donde juega el campeón de Europa, Juan de Ramos piensa que David Castedo debería haber sido llamado a jugar con la selección, ya que se lo ha merecido. Que no haya ningún jugador del Sevilla jugando con España es ya un dato a tener en cuenta. Habría que hacerse las preguntas oportunas.

El problema no es la decisión de Luís Aragonés. Él, como entrenador soberano, tiene todo el derecho del mundo a elegir al jugador que más le convenga. Pero no se puede actuar de este modo. La selección no ha hecho bien su trabajo. Si se sabe que un hombre está lesionado, en cuanto se confirme hay que llamar inmediatamente a su sustituto. Es inútil hacerlo cuando llegue la respuesta de la FIFA, ya que es conocido que esta tarda unos días en llegar. Y el colmo de males es que Pernía estaba en Argentina. En el otro hemisferio.

La verdad es que parece una chapuzada indigna de un equipo que quiere hacer algo en este mundial. Se ha perdido un tiempo precioso para que el jugador conozca al equipo, cómo juegan, haga piña, y se adapte en resumen. Pero bueno, así ha sido, y aquí llega Pernía, ‘el de la polémica’.

Tras el plácet y los despropósitos

Adrián Candal
Adrián Candal
viernes, 2 de junio de 2006, 22:35 h (CET)
Después de casi una semana de agonía con el asunto de la lesión de Asier del Horno, que para algunos encierra algún misterio, la Selección Española ha llamado a su sustituto. Mariano Pernía será quién ocupe la plaza de lateral zurdo. El hispano-argentino es un hombre polivalente, con mucha llegada, y que en el Getafe mostró sus fenomenales virtudes.

Sin embargo, Luís Aragonés ha llevado el tema del recambio con extremo secretismo. Un secretismo que ha generado más de un problema, y demasiadas especulaciones. No obstante, el nombre del sustituto ya lo conocía la prensa desde el sábado. Hay cosas que no se entienden. A todas luces fue una decisión que solamente ha causado problemas.

Las complicaciones que el ocultismo de Aragonés han producido son considerables. En Galiza se califica de ‘cacicada y vergüenza nacional’ (Diario Depor Sport) la decisión del entrenador nacional de no llamar a Capdevila. ‘La prensa de Madrid tira más que dos tetas y dos carretas juntas’, comentan en otro medio coruñés. En la prensa gallega se recuerda que el seleccionador dijo no hace demasiado que para ir al mundial habría que tener cierta experiencia en las convocatorias. Esto es, ya haber sido llamado anteriormente para jugar con ‘la furia’. Realmente, eso no se da, ya que el argentino nunca había sido llamado.

Pero no solo desde tierras gallegas se recrimina la postura del seleccionador. En Sevilla, donde juega el campeón de Europa, Juan de Ramos piensa que David Castedo debería haber sido llamado a jugar con la selección, ya que se lo ha merecido. Que no haya ningún jugador del Sevilla jugando con España es ya un dato a tener en cuenta. Habría que hacerse las preguntas oportunas.

El problema no es la decisión de Luís Aragonés. Él, como entrenador soberano, tiene todo el derecho del mundo a elegir al jugador que más le convenga. Pero no se puede actuar de este modo. La selección no ha hecho bien su trabajo. Si se sabe que un hombre está lesionado, en cuanto se confirme hay que llamar inmediatamente a su sustituto. Es inútil hacerlo cuando llegue la respuesta de la FIFA, ya que es conocido que esta tarda unos días en llegar. Y el colmo de males es que Pernía estaba en Argentina. En el otro hemisferio.

La verdad es que parece una chapuzada indigna de un equipo que quiere hacer algo en este mundial. Se ha perdido un tiempo precioso para que el jugador conozca al equipo, cómo juegan, haga piña, y se adapte en resumen. Pero bueno, así ha sido, y aquí llega Pernía, ‘el de la polémica’.

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