Tau Cerámica y Winterthur FC Barcelona, dos de los mejores equipos de Europa y grandes dominadores de la ACB de los últimos años, inician mañana jueves (Buesa Arena, 20:30 horas) la serie de semifinales de los "play-offs" por el título, marcada por la ausencia del director de juego baskonista, Pablo Prigioni, en los dos primeros choques, y por el duelo estelar entre Luis Scola y Juan Carlos Navarro.

Redacción
Vascos y catalanes han copado el palmarés nacional en los últimos años, aglutinando 11 de los últimos 13 títulos, al haber conquistado cuatro de las cinco últimas ligas (todas excepto la alcanzada por el Real Madrid la pasada campaña) y cinco de las seis últimas Copas del Rey (todas excepto la lograda por el Unicaja la pasada campaña), a lo que hay que añadir los dos títulos de la Supercopa.

El Tau aspira a alcanzar el "triplete": Supercopa, Copa del Rey y ACB, un hito histórico que superaría el doblete conquistado en la temporada 2001-02, en la que logró su primer y único título liguero. Ello significaría haber dejado en el camino a un rival al que ya ha superado esta temporada en los tres enfrentamientos que han mantenido (los dos de Liga regular, y la final de consolación por el tercer y cuarto puesto de la Euroliga de Praga).

Para los de Velimir Perasovic resultará vital contar con la ventaja del factor cancha, ganada gracias a la fortaleza demostrada en el Buesa Arena, donde esta temporada han logrado 22 victorias en 23 partidos (13 victorias de 14 en ACB, y 9 de 9 en Euroliga),

Sin embargo, la ausencia de Prigioni en los dos primeros duelos de la serie, por un virus que le ha provocado un episodio de fatiga extrema, supondrá una merma considerable en el engranaje ofensivo del equipo baskonista. El Tau deberá encomendar la tarea de la dirección a las alternativas del italo-argentino, Roko Leni-Ukic y Serkan Erdogan.

En ellos confía Luis Scola, quien tras su prodigiosa actuación en los cuartos de final frente al Akasvayu pondrá a prueba su dulce momento de forma en el cara a cara que entablará con Juan Carlos Navarro.

El Barcelona, por su parte, llega a Vitoria con el objetivo de llevarse al menos una victoria en los dos primeros partidos y con el reto es romper la mala racha contra el Tau esta temporada y acceder a la final en busca del primer título de la era Ivanovic, aunque también está en juego tener plaza en la Euroliga los próximos tres años.

El Tau ya se ha asegurado sitio en la máxima competición europea para las tres próximas temporadas y la otra plaza se la disputan el Barcelona y el Unicaja. A los malagueños sólo les vale ganar la ACB, mientras que los catalanes la lograrían si se llevan el título o si el Unicaja cae en semifinales o en la final, sea cual sea el rival.

El equipo barcelonista va a por todas en la ACB, pese a no sentirse favorito, después de haber alcanzado la final a cuatro de la Euroliga, y quiere cerrar con éxito la primera campaña de Ivanovic, también protagonista de la serie por su regreso a Vitoria como rival.

Los azulgrana tienen la preocupación de si finalmente podrá jugar el base estadounidense Shammond Williams, aquejado de problemas por una osteopatía de pubis que se le reprodujo tras el último partido de la serie de cuartos de final ante el Real Madrid, aunque estará en Vitoria con el resto de la expedición y su participación se mantendrá en duda hasta poco antes del partido, algo que se extenderá además al resto de partidos de las semifinales pese a que sigue un tratamiento de recuperación intensivo a fin de poder jugar ante el Tau.

Ivanovic cuenta con el resto de jugadores en buenas condiciones --aunque mantiene la baja ya conocida de Milos Vujanic, lesionado toda la temporada-- y ya baraja alternativas para cubrir la posible ausencia de Williams, un jugador que se ha ido creciendo a lo largo del curso en su primer año en el club, como reflejan sus números.

Ha logrado ser el jugador que más asistencias ha dado en la liga regular (170) en la historia del Barça, superando a Nacho Solozábal (151). Sin Williams, pueden ganar protagonismo Roger Grimau y Víctor Sada, aunque también se espera que ayuden en las tareas de base jugadores con mayor peso, como Gianluca Basile y Juan Carlos Navarro.