Los de Scariolo buscarán mas a sus hombres importantes, que tan bien lo hicieron en el encuentro de Malaga el pasado jueves. Una de las claves será volver a parar a Marcus Brown.

Matías Castañón / Enviado especial

Llegan los playoff por primera vez al Madrid Arena en esta mañana de domingo, y con el Adecco Estudiantes como anfitrión. Los colegiales, que tras sumar una victoria de oro en Alicante se han metido definitivamente en la post-temporada, se están enfrentando en estos cuartos de final al mejor equipo de la temporada regular, el Unicaja de Málaga.

Y es que el equipo de Sergio Scariolo ha sido el mas regular de la Liga ACB, demostrando que sobretodo cuenta, por encima de las estrellas, con un gran bloque. Una buena pareja de bases como Pepe Sanchez y Carlos Cabezas, aleros como Marcus Brown, Herrmann o Berni Rodriguez, y un juego interior con Garbajosa, Santiago, Pietrus y Nicevic es sinónimo de un juego agil, rápido y desequilibrante. Asi lo han demostrado durante las 34 jornadas de Liga, y en las otras dos competiciones que han disputado: en Copa del Rey cayó en las semifinales ante el Tau Cerámica, mas tarde campeón de la misma, y tras una gran primera vuelta en la Euroliga, acabaron perdiendo en un Top-16 al cual llegaron por la mejor vía, siendo primeros en un grupo donde Panathinaikos y Real Madrid estuvieron luchando de tu a tu con el equipo malagueño.

Todo esto sin dejar de lado la competición nacional, donde acabaron sumando 26 victorias por tan solo 8 derrotas, lo que ha supuesto acabar la Liga en la primera posición de la clasificación, un objetivo clave viendo los clubes que llegaban a las últimas jornadas ocupando la sexta y septima posición, Real Madrid y Akasvayu Girona.

Los colegiales han conseguido meterse definitivamente en estos playoff gracias al cambio de entrenador: aunque Juan Antonio Orenga estaba volviendo a hacer buenos partidos en el banquillo colegial, tras la derrota en Sevilla contra el Caja San Fernando las cosas no daban mucho mas de si. Con Pedro Martinez los colegiales estuvieron a solo un paso de meterse como anfitriones en la Copa del Rey (debían esperar la caida del Madrid en Badalona en la última jornada de la primera vuelta, cosa que no ha ocurrido), y en esta segunda vuelta han conseguido, tras la caida en picado del Pamesa Valencia, meterse en la post-temporada, aunque pasando en ocasiones autenticos apuros tras caer en partidos muy apretados donde eran ellos quienes llevaban la iniciativa.

Esta resurrección vino de la mano del mejor alero de la competición, Carlos Jimenez (una vez superado su particular “calvario”) y con una serie de jugadores que han ido de menos a mas durante la temporada como Iker Iturbe o Hernán Jasen. Pero si hay que destacar a una pareja por encima de las demas, ese premio se lo llevan Sergio Rodriguez y Will McDonald: mientras el americano se ha vuelto una pieza clave desde la llegada de Martínez, el base canario ha ido hacia adelante, cargandose a sus espaldas al equipo para llegar a los playoff.

En el primer partido de la eliminatoria la victoria fue para los malagueños por 84-78, aunque fueron los colegiales los que tomaron la iniciativa en el marcador durante la primera parte, de la mano de Jasen e Iturbe, haciendo ademas que uno de los hombres importantes de Unicaja, Pepe Sanchez, se cargase rápido de faltas. Pero como señalabamos, si hay algo que no le falta al equipo de Scariolo es banquillo: Carlos Cabezas fue el hombre del encuentro, anotando 19 puntos y parando tanto a Sergio Rodriguez como a Azofra. Por dentro, las cosas estuvieron bastante equilibradas, con ambos dominadores (McDonald y Santiago) jugando en su estilo habitual.

Hubo, eso si, dos “puntos negros” en el partido: por un lado, un partido tirando a flojo de Carlos Jimenez, donde numericamente no destacó aunque aportó en defensa; por otro, el pésimo encuentro de Marcus Brown, bien frenado por la defensa colegial, donde anotó cinco puntos, todos ellos desde la linea de personales (0/7 en tiros de campo). La clave volverá a estar en frenar al americano, aunque sin descartar a sus compañeros.