El Lagun Aro recuperó sus mejores momentos de la temporada y salvó airoso el último match ball. Con un primer tiempo tenso, igualado y con preeminencia defensiva (33-32), los del Botxo aceleraron en el segundo tiempo, donde un gran Panko, más la aportación de Rancik y Salgado, con el arreón del público, propició uno de esos días mágicos para el Lagun Aro, donde la victoria difícilmente se suele escapar.

Patxo Palacios / Enviado especial a La Casilla

El Lagun Aro recuperó sus mejores momentos de la temporada y salvó airoso el último match ball. Con un primer tiempo tenso, igualado y con preeminencia defensiva (33-32), los del Botxo aceleraron en el segundo tiempo, donde un gran Panko, más la aportación de Rancik y Salgado, con el arreón del público, propició uno de esos días mágicos para el Lagun Aro, donde la victoria difícilmente se suele escapar. El Pamesa estuvo errático, a juego con su irregular temporada y sólo Sklavos y Garcés funcionaron en los azulejeros con cierta regularidad. Al final se desató la fiesta en La Casilla, con fuegos artificiales y abrazos con la afición, fundida con su equipo.

El Pamesa, por su lado, cierra con un rotundo fracaso la temporada, fuera de los play-off por el título.
Se percibía en La Casilla el ambiente de las grandes ocasiones, como ante el Breogán o ante el Tau. El club había repartido aplaudidores y cartulinas con la leyenda “somos ACB”. Así el primer tiempo discurrió por parámetros de tensión, fuerte defensa y espesura en ataque en los dos equipos. Igualdad en el rebote y algo más de acierto en el tiro por parte bilbaína (55% frente a un escaso 39% ché). El mejor hombre naranja del primer tiempo fue Avdalovic, con 11 puntos, mientras que nadie destacaba especialmente en el Lagun Aro, con Scott, Rancik y Panko tirando de los suyos.

El resultado al descanso era bien elocuente: 33-32. Parecía un partido de la liga griega.El público se mantenía expectante, animoso, pero con preocupación a la vez, dada la igualdad y espesura en ataque vista en la primera mitad.Tampoco se seguía demasiado lo que acontecía en otros campos, los mismo que hacía Vidorreta como confesaría más tarde; buena señal. El tercer cuarto fue el clave del partido. El Lagun Aro se puso las pilas y comenzó a apretar más en defensa y ataque, con el apoyo incondicional del respetable.Aparece Panko para encarrilar el partidoEl alero americano posiblemente percibió la necesidad de él que tenía el equipo y destacó el tarro de las esencias, tanto en ataque como en defensa.

La Casilla era una caldera y un par de acciones electrizantes de éste elevaban la ventaja local a 8 puntos (49-41), la misma con que acabaría el tercer parcial (54-46), diferencias que no se habían dado hasta el momento. Para más inri, un desquiciado Timinskas cometía una absurda falta técnica por protestar tras no serle decretada una posible falta a Weis. Un triple de Savovic desde su casa empezaba a desmoronar a los valencianos ante el regocijo en el graderío.Así se encaraba el último cuarto, con ventaja de 8 para los bilbaínos y un Panko que seguía tirando de los suyos. La intensidad defensiva en los bilbaínoseguía manteniendo a raya las esporádicas apariciones de Sklavos y Garcés.

El partido entró en una fase de toma y daca, pero los locales empezaron a tener problemas en ataque, realizando posesiones largas que concluían con tiros lejanos no siempre bien seleccionados. Así, de los 13 puntos que tenían de margen a 5’54” parea el final, pasaron en 3 minutos a seis. Nada estaba decidido. Garcés tomó las riendas de los azulejeros y anotó varios puntos seguidos, que pusieron un nudo en la garganta de los espectadores. Sabedores de lo comprometido de la situación , éstos se dedicaron a gritar con fuerza “Somos ACB” hondeando las cartulinas al aire y golpeando con fuerza los aplaudidores. La presión ambiental fue ensordecedora. Un tiro errado de Avdalovic y un triple consecutivo de Savovic dictó sentencia, poniendo un casi definitivo 78-67 en el luminoso a dos para el final.El final fue frenético, pero se mantuvieron las diferencias. El pabellón estalló en una fiesta en el último minuto.

El equipo permanecerá una tercera temporada consecutiva en la ACB. Misión cumplida. Dos llamas en un fondo con fuegos artificiales y un petardazo comenzaron a continuación la fiesta en La Casilla. Los jugadores se dieron un merecido baño de multitudes con el público en ambiente festivo, con deportividad y saludos entre los dos equipos al término del partido.

FICHA TÉCNICA
82 – Lagun Aro Bilbao Basket (14+19+21+28): Salgado (10), Weis (6), Rancik (21), Panko (22), Scott (9) –cinco inicial-, Majstorovic (0), Stefanovic (0), Cabeza (0), Montáñez (2), Banic (0), Savovic (12).
70 – Pamesa Valencia (13+19+14+24): Harrington (6), Avdalovic (16), Dikoudis (5), Garcés (14), Timinskas (4) -cinco inicial-, Goldwire (9), Sklavos (14), Miralles (0), Luengo (0), Yebra (0), Stoykov (2).
Árbitros: Hierrezuelo, Llamazares. García Leal.Incidencias: Encuentro correspondiente a la 34ª jornada de Liga ACB, disputado en el pabellón La Casilla ante 5.000 espectadores. 19 h.
EL BUENO: Andy Panko. El mejor hombre de Lagun Aro volvió a serlo en el partido crucial de la temporada. 8 rebotes, 22 puntos, valoración 24 llevaron a su equipo en volandas.
EL FEO: El primer tiempo. Ambos equipos se mostraron atenazados y desacertados en ataque; la segunda mitad fue otra cosa.
EL MALO/b>: Timinskas. No aportó casi nada bueno el lituano para su equipo. Para colmo, acabó desquiciado, provocando una falta técnica en un momento clave del partido..
EL DATO: Fred Weis. El pívot galo acabó la temporada regular como máximo taponeador y reboteador ofensivo de la Liga.

SALA DE PRENSA
Ricard Casas: El técnico valenciano hizo una comparecencia relámpago en la Sala de Prensa. No estaba el horno para bollos.Resumió así el partido: “felicito al Lagun Aro, que ha sabido jugar con más intensidad en la fase decisiva del partido. El público les ha ayudado, claro está, pero eran los que más se jugaban en la cancha y se ha notado. Con la victoria de Adecco tampoco nos habría valido de nada. Es un final de temporada triste, ya que hicimos una primera vuelta buena, con 12 victorias. La segunda parte de la temporada hemos estado muy irregulares. Es un palo duro, habrá que analizar bien lo que ha pasado y pensar ya en el año que viene”.

Txus Vidorreta: Tras una breve aparición del presidente, Davalillo para agradecer a los medios el trabajo y el apoyo al club, aplausos incluidos, el coach bilbaíno diseccionó el partido contento, pero aparentemente tranquilo: “Hemos recuperado en estos dos últimos partidos en casa la solidez defensiva perdida los dos últimos meses. Esta victoria y la permanencia es un premio a un gran esfuerzo. Tuvimos un bajón un tiempo, que pagamos muy caro, ya que la temporada ha sido excelente, entiendo. Agradezco el apoyo de todos: público, plantilla, directiva, medios..., porque hemos sacado esto entre todos; es un homenaje a nuestra afición, que ha sido clave en nuestras dos últimas victorias”. Con respecto al futuro añadió: “no tengo nada pensado”

Prosiguió alabando “el excepcional esfuerzo ofensivo del equipo, con algunos momentos brillantes, al menos, en ataque. No podíamos esperar carambolas. Esta victoria nos ha dado un global de 14 victorias, una más que el año pasado, y dos más en casa ; hemos cumplido con casi todos los objetivos del año, si bien es cierto que hemos sufrido lo mismo. Se ve la gran igualdad que hay en la ACB, con muchos equipos entre 11 y 14 victorias, hemos superado al Barcelona, Tau, Unicaja... El bajonazo de hace dos meses, trabajando mal, nos ha condicionado mucho, pero hemos conseguido reaccionar a tiempo. El Pamesa se queda fuera de los play off después de 12 victorias en la primera vuelta ... se demuestra lo importante de las rachas”Sobre las celebraciones, Vidorreta señaló que lo había hecho “con la gente del equipo y con su familia, ganándose así la ‘multa’ del jefe de prensa, entre bromas”.

Por último señaló: “hemos estado tres cuartos de la temporada a un nivel medio alto con altibajos. Hay dos históricos que se van a la LEB como Breogán y Manresa. Subirán otros equipos fuertes, con sponsors ... así que la competencia será cada vez más dura y hay que seguir trabajando, con la ayuda de las instituciones y de todos, con humildad. Esa es la palabra clave. Cuando tengamos el nuevo pabellón creceremos más rápidamente”.