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Pablo Muñoz

Sin respiro

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Todavía no ha pasado ni una semana de la trepidante carrera en Nurburgring y ya están preparados en Montmeló los más de 100.000 incondicionales que arroparán a Fernando Alonso hasta la victoria en el Gran Premio de España de Fórmula 1.

Hace unos días quedó demostrado que Ferrari ha vuelto, que Schumacher está en buena forma, y que no está todo ganado para Fernando. Renault plantea dudas. La semana pasada era el único equipo que no había presentado mejoras en el coche, y Alonso ya lo advirtió. Encima, el asturiano también nos preocupa. Aunque en la rueda de prensa tras la carrera del domingo señalara que estaba muy contento por el segundo puesto, en la entrega de premios su cara denotaba cierta tristeza, o quizá desilusión. Su gesto era frío. Algo malo pasaba por su cabeza.

Y es que algo ocurre en la escudería francesa. Primero no dan prioridad a Alonso, y luego parece que no trabajan lo necesario por la puesta a punto de su coche. Están recelosos por la macha de su estrella a Maclaren. Fernando esta líder por méritos propios más que por el trabajo de su equipo. Mientras en Ferrari se frotan las manos. Piensan que tras los buenos resultados de la semana pasada pueden utilizar a Massa para restarle puntos al español en detrimento de Schumacher. Quieren convertir al brasileño en un aliado de Schumi. Como ya se vio en la salida de la carrera pasada, como milagrosamente el alemán recuperó la segunda posición cuando Massa ya le tenía ganada la aspiración. Órdenes de equipo.

Michelín tiene que ponerse las pilas este fin de semana si quiere ayudar a Alonso en la victoria, y si quiere competir al cien por cien con Bridgestone, que parece que va con los deberes hechos. Aunque no hay que fiarse porque el circuito español es conocido por su dureza con los neumáticos, ya que incluye numerosas y largas curvas de alta velocidad. Aunque Fernando juega en casa y parte como favorito en las apuestas, seguido muy de cerca por el alemán, es cierto que el Circuit de Catalunya es un trazado que los equipos utilizan habitualmente para sus entrenamientos, y por tanto lo conocen mucho mejor y pone más difícil la tercera victoria del asturiano esta temporada.

Vaya días nos esperan. Alonso, el final de la liga de fútbol y encima más motor, porque vuelven los Pedrosa, Lorenzo y compañía para demostrarnos sus jóvenes pero expertas aptitudes. No se ustedes, pero este fin de semana yo me quedo sentadito en mi sofá.

Sin respiro

Pablo Muñoz
Pablo Muñoz
sábado, 13 de mayo de 2006, 01:57 h (CET)
Todavía no ha pasado ni una semana de la trepidante carrera en Nurburgring y ya están preparados en Montmeló los más de 100.000 incondicionales que arroparán a Fernando Alonso hasta la victoria en el Gran Premio de España de Fórmula 1.

Hace unos días quedó demostrado que Ferrari ha vuelto, que Schumacher está en buena forma, y que no está todo ganado para Fernando. Renault plantea dudas. La semana pasada era el único equipo que no había presentado mejoras en el coche, y Alonso ya lo advirtió. Encima, el asturiano también nos preocupa. Aunque en la rueda de prensa tras la carrera del domingo señalara que estaba muy contento por el segundo puesto, en la entrega de premios su cara denotaba cierta tristeza, o quizá desilusión. Su gesto era frío. Algo malo pasaba por su cabeza.

Y es que algo ocurre en la escudería francesa. Primero no dan prioridad a Alonso, y luego parece que no trabajan lo necesario por la puesta a punto de su coche. Están recelosos por la macha de su estrella a Maclaren. Fernando esta líder por méritos propios más que por el trabajo de su equipo. Mientras en Ferrari se frotan las manos. Piensan que tras los buenos resultados de la semana pasada pueden utilizar a Massa para restarle puntos al español en detrimento de Schumacher. Quieren convertir al brasileño en un aliado de Schumi. Como ya se vio en la salida de la carrera pasada, como milagrosamente el alemán recuperó la segunda posición cuando Massa ya le tenía ganada la aspiración. Órdenes de equipo.

Michelín tiene que ponerse las pilas este fin de semana si quiere ayudar a Alonso en la victoria, y si quiere competir al cien por cien con Bridgestone, que parece que va con los deberes hechos. Aunque no hay que fiarse porque el circuito español es conocido por su dureza con los neumáticos, ya que incluye numerosas y largas curvas de alta velocidad. Aunque Fernando juega en casa y parte como favorito en las apuestas, seguido muy de cerca por el alemán, es cierto que el Circuit de Catalunya es un trazado que los equipos utilizan habitualmente para sus entrenamientos, y por tanto lo conocen mucho mejor y pone más difícil la tercera victoria del asturiano esta temporada.

Vaya días nos esperan. Alonso, el final de la liga de fútbol y encima más motor, porque vuelven los Pedrosa, Lorenzo y compañía para demostrarnos sus jóvenes pero expertas aptitudes. No se ustedes, pero este fin de semana yo me quedo sentadito en mi sofá.

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