Espectacular encuentro el presenciado hoy por más de cuatro mil personas en el centro insular de deportes. Ambos conjuntos tuvieron opciones para llevarse la victoria que finalmente se decantó para los visitantes con polémica arbitral incluida y es que, el colegiado señor Amorós, no es muy querido en la cancha canaria.

El Gran Canaria Grupo Dunas se presentaba al encuentro ávido de revancha tras haber quedado apeado de la copa del rey por el Unicaja en la última edición. Por su parte los visitantes buscaban asegurar el liderato de cara a conseguir un choque, en teoría, más cómodo, en la fase final de la liga. De este modo teníamos todos los ingredientes para disfrutar de un partido con sabor a playoff en el que ninguno de los dos conjuntos iba a ceder nada.

El choque comenzaba con predominio de los ataques frente a las defensas. En la primera acción de ataque de Unicaja Málaga, el pívot local, Sitapha Savané sufrió una aparatosa caída que lo llevo al banquillo cojeando. Esta acción marcó el inicio del partido pues los visitantes aprovecharon para marcar diferencias en el marcador anotando puntos a un ritmo vertiginoso impuesto por el base Pepe Sánchez. Los amarillos aguantaban “el tirón” como podían mientras Salva Maldonado hacía diversas rotaciones en el quinteto de forma que casi todos sus hombres tuvieron su aportación de cara a no dejar que los malagueños tomaran ventajas importantes.

Y ya en este primer cuarto comenzaron los problemas para los colegiados que vieron como un indisciplinado Marcus Brown se les enfrentaba con continuas protestas que le acarrearon una falta técnica. Así se llegaba al final del primer cuarto, ya con Savané recuperado y con un extraordinario triple del jugador amarillo Kennedy Winston desde más allá de la línea divisoria de los dos campos (25-26).

El triple de Winston había despertado al respetable cuya aportación fue “crescendo” hasta el cenit en el último periodo. En el segundo cuarto continuaba el espectáculo y el buen juego a pesar de bajar la aportación ofensiva, pues las defensas tomaron el relevo. Sergio Scariolo había diseñado una extraordinaria defensa sobre Savané y sus compañeros supieron, en todo momento, llevar el partido, sobre todo destacaba la aportación de los dos bases amarillos. Aún así el Unicaja no se dejaba amilanar y seguía mandando en el marcador hasta el descanso al que se llegaba con el resultado de 38-40.

El tercer cuarto fue otra historia, como cada uno de los que se vieron en el partido. Si el primero fue del ataque y el segundo de las defensas, el tercer cuarto pertenecía al Gran Canaria. Nada más empezar tres triples consecutivos ponían a los locales arriba y llevaba a Scariolo a pedir un tiempo muerto en el minuto 23 de partido (49-42) A partir de entonces la buena labor de los visitantes y el tempo del partido marcado por Pepe Sánchez impidió que los locales pudieran sacar suficiente “tajada” y mantuvieron a Unicaja en el partido. El intercambio de canastas en el resto del periodo favorecía los intereses visitantes, manteniéndolos a una distancia prudente sin demasiado desgaste físico.

Y así se llegó al definitivo último cuarto con los amarillos cuatro arriba y todo por decidir. Pero si el anterior periodo había sido de los locales éste era para el Unicaja, una defensa dura y un ataque efectivo eran los ingredientes necesarios para ganar el partido. El parcial 0-6 para los visitantes con el que se abría el cuarto hizo mella en el Gran Canaria, al que se le unía el descontento generalizado de la grada con la actuación arbitral. Y es que el ambiente estaba muy cargado, los colegiados pitaron muchas faltas rápidas a los canarios y el público pasó los ocho minutos que quedaban de partido increpándolos.

Una falta técnica a Salva Maldonado que protestaba mientras veía que el Unicaja Málaga seguía sumando desde la línea de tiros libres acabó con la paciencia del respetable entre los que alguno lanzó revistas y otros objetos a la cancha. No quedaba nada más que cortar, los Malagueños jugaban a las cuatro esquinas y aprovechaban sus oportunidades sus oportunidades mientras los locales las desperdiciaban y el público coreaba “que pite Amorós”

El bueno: El partido. En general se pudo ver un buen espectáculo, un partido de bastante contacto pero con mucha calidad en las dos canchas

El feo: El lanzamiento de objetos por parte de algún sector del público. Son actitudes que no deberían de tener cabida en espectáculos deportivos.

El malo: El arbitraje. Una vez más los colegiados tuvieron que salir por la puerta trasera en el Centro Insular de deportes y es que, en líneas generales estuvo mal para ambos conjuntos.

67 - Gran Canaria Grupo Dunas (25+13+21+8):* Moran (5), Guerra (-), Shaw (5), Marcus Norris (17) y Savané (17) -equipo inicial-, Martínez (2), Klein (2), Winston (13), Baldo (3) y Williams (3).

75 - Unicaja (26+14+15+20):* Sánchez (11), Herrmann (-), Garbajosa (14), Santiago (8) y Brown (22) -equipo inicial-, Rodríguez (10), Risacher (2), Nicevic (1), Cabezas (5) y Pietrus (2).

Arbitros:* Amorós, Llamazares y Cortés. Sin eliminados.

Sala de prensa
*Sergio Scariolo
El técnico visitante vio “un buen partido” y calificó la victoria como de “importante”. Y es que “La victoria refuerza al equipo, es una cancha importante y un rival muy bien armado”. Según dijo la clave de la victoria estaba en el último cuarto dónde su equipo fue mejor en ambos lados de la cancha. Además no quiso entrar a valorar la actuación arbitral simplemente dijo que “el partido era difícil de arbitrar”. En cuanto al futuro dijo que tendrían que seguir trabajando para mantener el liderato la próxima semana en un partido difícil.

Salva Maldonado
El entrenador amarillo habló de “un partido interesante, tenso, con un primer cuarto muy ofensivo y un resto de encuentro dónde se impusieron las defensas”. Maldonado dijo haber visto la clave del partido en la cuarta falta de Daniel Santiago, tras la cual con la salida de Pietrus “no supimos reaccionar y cuando pudimos ya no había tiempo”. También dijo que “el Unicaja ha ganado merecidamente, nosotros también hicimos méritos pero no pudimos, tal vez en otras circunstancias de final de partido si pudiéramos haber ganado”. A raíz de esto añadió que “no voy a hablar de los árbitros” y también dijo que “no estaba descontento con el partido y con el juego del equipo”.