La trigesimosexta jornada de liga ha puesto en enfrentamiento a la lógica y a la matemática. Cuando todavía quedan dos jornadas por disputarse, parece que va haber pocos cambios tanto en la parte alta de la tabla como en la zona descenso. Pero uno no se puede fiar. Sino que se lo pregunten al Levante, que se marchó a segunda en el último suspiro en detrimento del Mallorca, o al Real Madrid, que hace dos campañas perdió el pase directo a la Liga de Campeones bajando dos puestos en las dos últimas jornadas.

Por ello, las matemáticas, esa ciencia deductiva que estudia las propiedades de los entes abstractos, como son los números, pueden salirse con la suya, ya que muestran que todavía no hay nada perdido para muchos equipos que aspiran a puestos europeos, o para los que luchan por mantener la categoría.

Excepto el Barcelona, justo campeón que ha hecho los deberes a tiempo, y el Málaga, que ya suspendió en los exámenes de febrero, el resto tiene mucho que demostrar aún. El Madrid ya solo depende de si mismo tras su victoria en Santander y además se asegura la Champions. El más perjudicado es Osasuna porque los números dicen que incluso el Sevilla o el Celta pueden optar a la élite del fútbol europeo, y que el Depor puede coger una placita en la UEFA.

Más misterio hay aún si cabe en la parte baja. Hasta el Mallorca que está en duodécima posición no está a salvo. A falta de dos jornadas hay ocho equipos que no tienen clara su permanencia. Vale, es muy difícil que los baleares, donostiarras y bilbaínos desciendan pero hasta que los números no demuestren lo contrario, todavía no hay nada perdido. Sobre todo para el Alavés. La victoria ante el Betis le da esperanzas, y pone a los sevillanos con la cuerda en el cuello. Peor lo tiene el Racing que se tendrá que jugar un mano a mano con los de Vitoria.

Mientras, el Cádiz se aferrará a la épica para ganar los dos partidos que le quedan si quiere salvarse, eso sin contar lo que hagan los equipos que le preceden. Ahora mismo está a cuatro puntos de la salvación de seis posibles. El último partido ante el Málaga podría ser un adelanto de lo que vivirán ambos conjuntos en segunda división la temporada que viene.

Acaba de concluir la jornada número 36 y mañana comienza la penúltima. No hay descanso, pero si hay mucha emoción. El desenlace final, la semana que viene. Bueno si se aclaran la FIFA y la Liga de Fútbol Profesional.