Semifinales justas habemus: Arsenal-Villarreal Milan-Barça. Con apuros para alguno de los favoritos, especialmente para el Milan, que sacó el billete in extremis, en el minuto 88, ante el buen Olympique de Lyon, los favoritos tras la ida hicieron los deberes, con más brillantez o menos y obtuvieron el pase que les convierte oficiosamente en los cuatro mejores equipos de Europa.

Uno temía por el Villarreal, dado el oficio destructor de los interistas, pero con sufrimiento Riquelme, Forlán, Arruabarrena y compañía pusieron las cosas en su sitio. Meritoria trayectoria la de los castellonenses; su efectivo trabajo con la cantera y su red de ojeadores lleva un par de años dando los frutos apetecidos; modelo sin duda a seguir para otros clubes de superior presupuesto e infraestructura (R.Madrid, At.Madrid …)

Los blancos, por cierto, parece que siguen fichando según lo que algunos medios van poniendo en el candelero: ahora parece que está de moda el central lionés Diarra; así les luce el pelo a algunos, con sus fichajes mediáticos, renunciando al sentido común y al trabajo bien dirigido desde la secretaría técnica o dirección deportiva.

Pero no me quiero desviar del tema, el Barça cumplió con su cometido y se impuso al Benfica lisboeta de Koeman sin demasiados lujos; los de Rijkaard llevan varias jornadas con poca puntería y un nivel menos brillante, pero de efectividad similar. Se han ganado a pulso por la temporada que llevan el cartel de favoritos a llevarse la que sería su segunda Champions.

El Arsenal pasó sin apuros en Turín tras aguantar bien a la Vecchia Signora; de hecho pudieron hasta ganar de nuevo a domicilio. Decepcionante Juve de Capello. Así pues, se nos presenta una preciosa eliminatoria Arsenal-Villarreal entre las dos revelaciones de esta edición. Dos equipos que juegan bien al fútbol, más potentes y rápidos acaso los gunners, más técnicos los amarillos, y que han rayado a gran nivel en Europa. Por el contrario, no han destacado en sus respectivas ligas, pero ambos llegan en buen momento a esta recta final.

La eliminatoria Barça-Milan bien podía haber sido la final por el potencial de ambas escuadras, pero no es moco de pavo tampoco una semifinal. La pegada de Shevchenko frente a la de Eto’o, la calidad de Kaka frente a la de Ronaldinho, la brega y distribución de Seedorf frente a la de Deco … ¿quién da más? La trayectoria culé, incluso su fútbol, ha deslumbrado este año por momentos; el Milan ha sido menos espectacular, pero con un gran nivel también. Ligero favorito pues el Barça; esperemos que para el día 18 Xavi esté en condiciones de reaparecer.

En definitiva, unas apasionantes semifinales entre cuatro grandes equipos que han llegado ahí por méritos y practicando un gran fútbol.

¡Que lleguen ya el 18 y el 19!