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Patxo Palacios

Resaca agridulce de la Champions

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Las espadas en todo lo alto para la vuelta de los cuartos de Champions. De todo ha habido en la viña del señor. El martes Benfica y Barça disputaban el a priori más desequilibrado emparejamiento y acabaron como empezaron; bien es cierto que por juego y oportunidades podían haber quedado 1-3, 2-4 o algo así.

El Benfica se pertrechó bien atrás y a la contra pudo sorprender en más de una ocasión a un Barça a buen nivel, pero bastante fallón en ataque, como ya le sucediera en Málaga.

En el otro match, el Arsenal de Wenger, que todavía algunos en este país siguen calificando de equipo de segundo nivel, le metió un soberano repaso a la Vecchia Signora de Capello, que no daba crédito a lo que veía desde el banquillo.

2-0 y gracias, dos expulsiones gratuitas de los bianconeros al final que indicaban un claro desquiciamiento en la escuadra italiana y la buena actuación de Bufón evitaron el tercero, que habría sentenciado la eliminatoria.

Espectacular Henry, lo cual no es mayor novedad, pero es que Hleb, Eboué, Senderos, Cesc, Reyes y compañía rindieron a un altísimo nivel. Dudo seriamente que hayan mantenido el exhibido ante Madrid y Juve en la Premier; de haberlo hecho estarían disputándole el título al Chelsea, con seguridad.

El Villarreal mostró sus credenciales en San Siro y, no siendo mal resultado el 2-1, por el nivel y oportunidades de unos y otros, los amarillos bien podían haberse traído un empate a Castellón. Esperemos que no se tengan que lamentar de las tres buenas oportunidades marradas por su buque insignia Riquelme (por cierto, vaya lanzamiento al larguero en libre directo del gaucho).

El Inter sigue siendo un equipo antipático, con aire caduco, pese a tener buenos elementos como Adriano o Zanetti (el mejor de su equipo). Pero rezuma decadencia, con jugadores pasados ya de vuelta, que hace tiempo han dado ya lo mejor de sí, allí o en otros clubes (Recoba, Figo, Córdoba, Verón …), lo que unido a sus catenaccios fuera de casa y conformismo cuando el resultado es favorable, como hiciera el miércoles, le configura como club rácano, nada atractivo.

Uno se acuerda de la eliminatoria Valencia-Inter de hace algunas temporadas con Cúper en el banquillo interista, que tenía por cierto mejor equipo que el actual, con Vieri y compañía. Pese a sacar el resultado adelante, fue lamentable la muralla y la renuncia al fútbol que practicaron durante los 90 minutos; sólo les faltó colgarse del larguero.
Por eso, que se prepare el Villareal para lo peor el próximo martes.

El Olympique Lyonnais – Milan apuntaba a empate y es lo que acabó siendo. El Milan se mostró como un bloque superior, pero Shevchenko no acertó a marcar ninguna de las oportunidades que dispuso y que pudo haber encarrilado ya en Lyon la eliminatoria. Cuidado porque el 0-0 es un arma de doble filo, pues un gol fuera de casa ya obliga al local a marcar dos. Mal harían en confiarse rossoneros o culés.

En todo caso, la ida de los cuartos dibuja unas semifinales con Barcelona, Milan, Arsenal y Villarreal, si los cuatro son capaces de mantener su nivel habitual en la vuelta.

Resaca agridulce de la Champions

Patxo Palacios
Patxo Palacios
viernes, 31 de marzo de 2006, 21:00 h (CET)
Las espadas en todo lo alto para la vuelta de los cuartos de Champions. De todo ha habido en la viña del señor. El martes Benfica y Barça disputaban el a priori más desequilibrado emparejamiento y acabaron como empezaron; bien es cierto que por juego y oportunidades podían haber quedado 1-3, 2-4 o algo así.

El Benfica se pertrechó bien atrás y a la contra pudo sorprender en más de una ocasión a un Barça a buen nivel, pero bastante fallón en ataque, como ya le sucediera en Málaga.

En el otro match, el Arsenal de Wenger, que todavía algunos en este país siguen calificando de equipo de segundo nivel, le metió un soberano repaso a la Vecchia Signora de Capello, que no daba crédito a lo que veía desde el banquillo.

2-0 y gracias, dos expulsiones gratuitas de los bianconeros al final que indicaban un claro desquiciamiento en la escuadra italiana y la buena actuación de Bufón evitaron el tercero, que habría sentenciado la eliminatoria.

Espectacular Henry, lo cual no es mayor novedad, pero es que Hleb, Eboué, Senderos, Cesc, Reyes y compañía rindieron a un altísimo nivel. Dudo seriamente que hayan mantenido el exhibido ante Madrid y Juve en la Premier; de haberlo hecho estarían disputándole el título al Chelsea, con seguridad.

El Villarreal mostró sus credenciales en San Siro y, no siendo mal resultado el 2-1, por el nivel y oportunidades de unos y otros, los amarillos bien podían haberse traído un empate a Castellón. Esperemos que no se tengan que lamentar de las tres buenas oportunidades marradas por su buque insignia Riquelme (por cierto, vaya lanzamiento al larguero en libre directo del gaucho).

El Inter sigue siendo un equipo antipático, con aire caduco, pese a tener buenos elementos como Adriano o Zanetti (el mejor de su equipo). Pero rezuma decadencia, con jugadores pasados ya de vuelta, que hace tiempo han dado ya lo mejor de sí, allí o en otros clubes (Recoba, Figo, Córdoba, Verón …), lo que unido a sus catenaccios fuera de casa y conformismo cuando el resultado es favorable, como hiciera el miércoles, le configura como club rácano, nada atractivo.

Uno se acuerda de la eliminatoria Valencia-Inter de hace algunas temporadas con Cúper en el banquillo interista, que tenía por cierto mejor equipo que el actual, con Vieri y compañía. Pese a sacar el resultado adelante, fue lamentable la muralla y la renuncia al fútbol que practicaron durante los 90 minutos; sólo les faltó colgarse del larguero.
Por eso, que se prepare el Villareal para lo peor el próximo martes.

El Olympique Lyonnais – Milan apuntaba a empate y es lo que acabó siendo. El Milan se mostró como un bloque superior, pero Shevchenko no acertó a marcar ninguna de las oportunidades que dispuso y que pudo haber encarrilado ya en Lyon la eliminatoria. Cuidado porque el 0-0 es un arma de doble filo, pues un gol fuera de casa ya obliga al local a marcar dos. Mal harían en confiarse rossoneros o culés.

En todo caso, la ida de los cuartos dibuja unas semifinales con Barcelona, Milan, Arsenal y Villarreal, si los cuatro son capaces de mantener su nivel habitual en la vuelta.

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