Ayer se realizó en Paris, sede de la final, el sorteo de las últimas rondas de la Champions League. Teniendo en cuenta la entidad de los equipos presentes en el bombo, se puede considerar que los dos equipos españoles han salido relativamente bien parados del envite.

Y es que además de jugar el partido de vuelta en casa, parecía claro que el objetivo de los dos clubes hispanos en este sorteo era evitar a toda costa a los grandes "cocos", al menos a priori, como podían ser Milan y Juventus, e intentar que tocase el Benfica. Pues bien, jugada redonda, que podría ser perfecta si el Ajax eliminase el próximo martes al Inter.

Evidentemente, el que mejor suerte ha tenido ha sido el Barcelona. Sin ser un mal equipo, que evidentemente ninguno de los que hasta aquí ha llegado lo es, sí parecía claro que el Benfica era el conjunto menos bueno. Hay que tener en cuenta que el Villarreal cimentó su clasificación en la fase de grupos con una victoria en el Estadio de la Luz lisboeta, lo cual habla de la relativa asequibilidad del rival.

Respecto al Villarreal, aún no se puede hablar de rival. Hay más probabilidades de que éste sea el Inter, lo que prácticamente asegura el bostezo en el partido de Italia y la emoción en el de España, si es que sigue la lógica imperante en los duelos italo-españoles, a menos que esté el Milan de por medio. Si el Ajax diera la sorpresa, sería una oportunidad irrepetible para los amarillos de cara a jugar las semifinales de la Champions.

Como colofón, señalar que también se han sorteado las semifinales de la competición, que bien podrían ser Barcelona-Milan y Villarreal-Juventus (hala, ya tienen ustedes pronóstico) e incluso la final, en la que el Barcelona, en caso de llegar, actuaría como local. Sueño con un Barça-Villarreal. ¿Y ustedes?