Estimulan nuestro cuerpo, dan rienda suelta a nuestras fantasías y convierten una relación sexual en algo mucho más pasional. Los juegos sexuales son ideales para mejorar nuestra vida sexual. Siempre debemos realizarlos de menos a más, comenzando por los más sencillos y comprobando los que más nos gustan y hacen de nuestras relaciones sexuales algo todavía más placentero.

Cita con un desconocido

Es una fantasía de muchos, que puede hacerse realidad a través de un juego. Tener sexo en pareja con una persona a la que no conocemos o que no es de nuestro círculo más íntimo es posible gracias a la fantasía. La pareja se convierten en actores para disfrutar olvidando su propia persona. Así daremos más rienda suelta a nuestra pasión.

Juguetes

Aunque muchas veces son utilizados para provocarse placer a uno mismo, todos los juguetes sexuales son más divertidos en pareja. Cada vez más personas se animan a introducir en sus prácticas en pareja vibradores y bolas chinas. El interactuar con juguetes sin tener el control sobre ellos, dejando que la otra persona nos sorprenda aporta una perspectiva diferente a la relación sexual.

También es posible añadir al juego otros elementos muy conocidos como esposas, aceites, velas u otros accesorios que, aunque son viejos conocidos, nunca pasan de moda en el sexo.

Dentro de los juguetes sexuales encontramos adaptaciones de juegos de mesa tradicionales para una larga noche de pasión. Las cartas son los elementos más utilizados porque pueden crearse diferentes historias. En cualquier tienda podemos encontrar diferentes juegos eróticos en pareja de entre los que podemos elegir en función de lo que más nos guste.

Juegos con comida

Es todo un clásico, aunque mucha gente todavía no se ha atrevido a probarlo. Hay alimentos que por su composición o por la forma en la que se venden, pueden sernos de mucha utilidad para aumentar la temperatura durante nuestras relaciones sexuales.

El primero que se nos viene a la cabeza es la nata. Es fácil de usar, cómoda y dulce. Generalmente se usa para realizar dibujos en el cuerpo y realizar un pequeño sendero sobre la piel. Otros alimentos que nos pueden ser muy útiles son los asiáticos, como por ejemplo el sushi. Dar de comer al otro de forma sensual puede ayudar mucho a aumentar la pasón. Y todo esto podemos combinarlo con el hielo, a bocados o para cambiar la temperatura.