Mi artículo de hoy va sobre dos monstruos de la comunicación que cautivaron en su día al que suscribe, con diferentes registros y recursos para ello.

Uno se acuerda allá por los años 80 cómo tras acabar los deportes en la cadena SER, en los calores del verano, pues en pleno curso era imposible permanecer en el reino de los vivos a esas horas... en la quietud y oscuridad de la noche de un chaval de 11 años, unos sonidos penetrantes de órgano y guitarra penetrantes, inquietantes, poderosos y, ante todo, bellos, entraban como misiles por oídos y poros.

Era el inicio de ‘El loco de la colina’ de Jesús Quintero; bastante más tarde descubrí que esa música correspondía al ‘Shine on your crazy diamonds’ de Pink Floyd.

Las humanistas, trascendentes y embriagadoras reflexiones del loco, con el dominio de los silencios y los diferentes tonos en éstas y en sus entrevistas, me convirtieron en un insomne veraniego durante varios años. Quintero no ha dejado de ser desde entonces ‘el loco’, pese a los distintos nombres que han llevado sus diversos programas en tv y radio (‘el perro verde’, ‘cuerda de presos’...)

Esa naturaleza bohemia del personaje y la puesta en escena no han variado significativamente. Quintero ha incorporado a su programa (TVE, martes noche) una melodía nueva, tan bella como inquietante, diría. Se trata del sonido del duduk (instrumento de viento-madera) con reminiscencias árabes de un músico armenio, Djivan Gasparian, que traslada al espectador a un territorio místico, desconocido y sumamente atractivo, con las reflexiones de fondo del poeta inveterado, del gran transmisor humanista ...diferente a todos, bienvenido Jesús.

El otro gran reaparecido es José María García … como con ‘el loco’, quién no recuerda a las 12 de la noche, la mítica melodía de entradilla de ‘Simple minds’ y la voz en off “ ...‘supergarcía en la hora cero’, y a continuación la característica voz del pequeño gran hombre, incisivo directo y con una capacidad de llegada al radioyente cual derecha de Muhammad Ali.

Tras varios años out, el azote de las ondas reaparecía en una conversación digital en elmundo.es el pasado jueves, respondiendo a todos los internautas conectados y allí fue desgranando todos los temas de actualidad deportiva y social del momento. Se percibía en él la fuerza y el vigor recuperados, felizmente, tras una larga enfermedad… José María sigue adornándose con expresiones míticas: “…torrrpe torrpe como un mulo, pero honrado a carta cabal…”, refiriéndose a Angel Villar.

Sus inesperadas salidas de la COPE y la última de Onda Cero, por divergencias con la cúpula, más que arredrarle parece que le han dado fuerza.

Se podrá discutir su estilo directo y personalista, su dureza en no pocas ocasiones, con propios (su mismo equipo) y ajenos, pero pocos podrán atacar al ‘Super’, como le llamaba Luis Fernández, por falta de rigor o desinformación.

El asturiano-madrileño sigue teniendo entre ceja y ceja, por cierto, al ilustre presidente del Madrid... tiembla Florentino.

El ‘amigo de sus amigos’ ha vuelto, aún es pronto para escribir memorias, está en plena batalla. Pero García no duda en fustigar a quien considera ahora ‘pesebrero’ político, íntimo amigo suyo desde los tiempos de Antena 3, como Luis Herrero, o a otro excompañero, en plena trinchera política, poco apegado a la neutralidad objetiva del informador, como Federico J. Losantos. Bienvenido García.