El piloto español Fernando Alonso tendrá su Toyota número ocho en la pole de las 24 Horas de Le Mans, que se disputan este fin de semana, después de las dos sesiones de calificación de este jueves, donde además pudo probar las condiciones de lluvia en la noche, un escenario que se prevé para sábado.

Alonso, que llega líder del Mundial de Resistencia al trazado galo después de ganar en las 6 Horas de Spa, sigue haciendo acopio de buenas noticias en su aventura paralela a la Fórmula 1. El piloto asturiano se bajó del Toyota TS050 Hybrid sabiendo que saldrán desde la primera posición en la parrilla.

El japonés Kazuki Nakajima, con un tiempo de 3:15.377, fue quien mantuvo la posición de prestigio en La Sarthe, como ya hiciera en la Q1 del miércoles y sin cambios en la Q2. La tercera y definitiva tanda de calificación dejó la gran vuelta de Nakajima, lanzado y sin tráfico aprovechando bien su momento.

Para Alonso quedó la última hora, los últimos relevos en un simulacro perfecto de lo que le espera ya en carrera el sábado por la noche. El doble campeón del mundo de Fórmula 1 pudo tomar nota de los entresijos de la noche, tras el aperitivo del miércoles, pero además lo pudo hacer con la lluvia que aparece en el parte del sábado.

El piloto español manejó bien los 1.000 caballos de potencia de su Toyota, aunque tuvo que entrar en boxes tras algún susto y con la lluvia creciendo en intensidad. Con un neumático intermedio, Alonso completó la sesión hasta la bandera a cuadros, llevando el coche al garaje con la pole ya asegurada.

El debut de Alonso en las 24 Horas de Le Mans, donde busca un paso más hacia la 'Triple Corona', sigue señalando un prometedor desenlace, pero la lotería de 16 Grandes Premios en uno, a lo que equivale la mítica prueba de resistencia, aún tiene mucho que decir. Toyota firmó además el doblete, con su otro prototipo, número 7, segundo a dos segundos.